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Los pantanos de la ciudad se han colocado en el 32,27 por
ciento de la ciudad después de los transvases realizados por
el barco aljibe y el agua dejada por las lluvias durante
este mes de diciembre. Con todo, los embalses del Renegado y
el Infierno han perdido más de 1.500.000 metros cúbicos en
un año, pues el 28 de diciembre de 2008 se encontraban al
máximo de su capacidad total.
Tras las intensas lluvias que han
visitado la ciudad desde mediados de diciembre y los 400.000
metros cúbicos de agua transvasados por el buque aljibe los
pantanos que abastecen la ciudad se encuentran al 32,27 por
ciento de su capacidad total.
Según continuaron informando desde
la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, a día de
ayer los pantanos ceutíes acumulaban un total de 738.823
metros cúbicos de agua embalsada, frente a los 2.289.680 que
alcanza su volumen total.
En esta cifra, es decir, al cien
por cien de su capacidad total, se hallaban los pantanos en
la misma fecha del año pasado, tras las inundaciones que
padeció la ciudad durante el otoño.
En conjunto, las lluvias de este
diciembre han aportado 270,6 litros por metro cuadrado. O lo
que es lo mismo: su aportación al embalse del Renegado fue
de 271.528 metros cúbicos de agua, mientras que en El
Infierno se dejaron 83.514 metros cúbicos.
El 25 de noviembre, día de
Navidad, fue cuando las nubes se mostraron más generosas con
los pantanos de la ciudad, dejando 55,5 litros por metro
cuadrado. Le siguieron en pluviosidad el día 23, con 42,5
litros por metro cuadrado, y el día 24, con 33,3.
1.500.00 m3 menos
Como se aprecia, los pantanos de
la ciudad han perdido más de 1.500.000 metros cúbicos de
agua embalsada en un año.
Así el pantano del Renegado
acumulaba ayer 547.006 metros cúbicos de agua, mientras hace
un año disponía de 1.635.414 metros cúbicos. Por su parte,
el Infierno ha pasado de tener 654.266 metros cúbicos a
poseer 191.817 metros cúbicos.
Es decir, que el agua embalsada
por la ciudad ha disminuido 77 puntos porcentuales en un
año. Una situación que podría ser peor, pues llegó a
colocarse casi en la irrisoria cantidad del 7 por ciento de
su capacidad, de no haber llegado el barco aljibe y las
lluvias que han visitado la ciudad desde el pasado día 2 de
diciembre.
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