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ACTUALIDAD - JUEVES, 31 DE DICIEMBRE DE 2009


flota pesquera. fidel raso.

meteorologia
 

Los vientos del suroeste podrían alcanzar hoy los 70 km por hora

La línea marítima que une Tánger con la Península ha funcionado intermitente, aunque las conexiones con Ceuta no se han suspendido ni el caso del fastferry de FRS
 

CEUTA
José García

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Las rachas de viento alcanzarán hoy una velocidad incluso más alta que la de ayer, situándose en los setenta kilómetros por hora. La alerta amarilla en la ciudad, que comenzó anoche a las 24.00 horas, no cesará hasta la media noche de mañana, Año Nuevo. La línea entre Tánger y la Península sufrió ayer varias interrupciones.

Ni las persistentes precipitaciones ni las fuertes rachas de viento abandonarán Ceuta durante el Año Nuevo ni durante la jornada de hoy, según la predicción de la Agencia Española de Meteorología.

Así lo explicaron a este periódico desde Protección Civil, que indicó que la alerta amarilla comenzaba a las doce de la noche de ayer, con lluvias continuadas aunque sin trombas. Una situación meteorológica que se mantendrá, al menos, hasta las doce de la noche de mañana.

Aunque lo peor resultará el viento. Rachas de hasta setenta kilómetros por horas que serán incluso más fuertes a determinadas visitarán la ciudad durante la jornada de hoy.

En todo caso, se trata de vientos del sur y suroeste que no afectarán la navegación entre Ceuta y Algeciras. Así lo estima, al menos, Tarifa Tráfico, que señaló que ayer salieron todos los barcos de esta línea, incluido el fastferry más pequeño, de la compañía FRS.

Como no hay Levante, esta línea marítima no se vio ayer afectada. Pero otras sí. Es el caso de la que une la ciudad marroquí de Tánger con la Península, donde los rápidos salieron ayer de manera intermitente, con notorias interrupciones. La situación en esta zona del Estrecho era mala, según las mismas fuentes, que apuntaron que las olas allí han llegado alcanzar hasta los cuatro metros de altura.

Respecto a la ciudad de Ceuta, la AEMET pronostica un cien por cien de riesgo de precipitaciones para hoy, disminuyendo este índice hasta el sesenta por ciento para la jornada de mañana, Año Nuevo.

Las temperaturas serán hoy suave, con una máxima de diecisiete grados y una mínima de trece. La previsión para mañana viernes es que oscilen entre los doce y los dieciocho grados. Los vientos también se prevén ligeramente más suaves durante la jornada de mañana.

Peligro en la Cabililla

En cuanto a incidencias, el hecho más digno de mencionar sucedió en la barriada de Benzú, a la altura de la Cabililla.

Según explicaron desde el servicio contra incendios y emergencias, una de las enormes piedras situadas al pie de la carretera se desplazó varios centímetros de su ubicación con grave peligro para las viviendas que se encuentran abajo. Según las mismas fuentes, se trata de una piedra de al menos quince toneladas que se habría desplazado como consecuencia no sólo del viento, incapaz por si sólo de provocar este desprendimiento, sino también de la lluvia.

Así las cosas, hasta allí hubo de trasladarse un arquitecto municipal para asegurar su sujeción, una labor que deberá continuar hoy primera hora.

La otra incidencia provocada ayer por el temporal resultó de menos alcance aunque también entrañaba cierto peligro para los ciudadanos. Esta provocó una intervención que se inició a las seis y media terminó tres cuartos de hora después.

Sucedió también en Benzú y se trató un cable de Telefónica que se cayó a la calzada y que los efectivos de bomberos tuvieron que amarrar provisionalmente con un alambre mientras se daba el aviso a la compañía de telecomunicaciones.

En todo caso, las incidencias podrían ir a más durante las jornada de hoy, ya que se prevé un fortalecimiento de los fuertes vientos que están visitando la ciudad desde la madrugada de ayer.

Grietas

En otro orden de cosas, el servicio de bomberos hubo ayer de intervenir también en la calle Cervantes como consecuencia del mal estado de un techo, aunque en este caso no se trataba de una incidencia provocada por el fuerte viento.

Los efectivos tuvieron que desplazarse hasta el lugar a primeras horas de la mañana, a un edificio bastante viejo en cuyo piso alto se había detectado unas grietas.

La intervención tuvo que continuar a las tres de la tarde, aunque el problema ha resultado ya completamente subsanado.

Los vientos ayer superaron los 30 kilómetros por hora y tras el repunte esperado para hoy, volverán a descender mañana hasta los 40.
 

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