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La suma de 7.200 euros y 90 días de trabajo en beneficio de
la comunidad fueron las penas solicitadas por la
representante del Ministerio Fiscal para un hombre que
supuestamente conducía sin carné por Príncipe Felipe, ya
condenado por ello en anteriores ocasiones. En su defensa,
el acusado señaló que el día de la detención no estaba
circulando que el vehículo estaba estacionado y que la
Policía Local le “persigue”.
Un ceutí se sentó ayer en el banquillo de los acusados del
Juzgado de lo Penal por un presunto delito contra la
seguridad vial por el que el Ministerio Fiscal en la ciudad
solicitó una multa de 24 meses con una cuota diaria de 10
euros, es decir, 7.200 euros, y 90 días de trabajo en
beneficio de la comunidad.
Por su parte, el letrado de la defensa pidió la absolución
alegando que las contradicciones de los agentes de la
Policía Local habían sido contradictorias y esgrimiendo que
desde el furgón policial, no podían identificar al imputado,
en el caso de uno de los testigos.
Los hechos a juzgar por al magistrado tuvieron lugar el 3 de
febrero, sobre las 22.15 horas, en las inmediaciones de la
barriada Príncipe Felipe. Según lo relatado por el propio
acusado, que reconoció no tener el permiso de circulación y
haber sido condenado por ello en anteriores juicios, ese día
no estaba circulando, teniendo el turismo estacionado y que
la Policía Local “me persigue porque uno de ellos dice que
amenacé a su hijo en fin de años. Pero estos ni siquiera son
los que me detuvieron”.
Uno de los agentes manifestó haber encontrado el coche
circulando en dirección contraria y haber contrastado con la
central el que no tuviera carné. Sin embargo, el otro
policía manifestó que el furgón policial iba detrás del
coche del acusado y que lo vio por el cristal delantero.
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juicio
