PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - LUNES, 29 DE MARZO DE 2010

 

OPINIÓN / EL ESQUINAZO

Estamos en Semana Santa
 


Jesús Carretero
jesuscarretero@elpueblodeceuta.com

 

Mucha fantasía, más de un mito, pero también mucha fe en unos hechos que sucedieron hace dos mil años.

¿Qué es hoy la Semana Santa?. Dejando de lado las creencias de quienes han seguido, al pie de la letra, las tradiciones, la Semana Santa hoy es, al menos en España, una serie de días que cambian la rutina del día a día de varios meses, y con este cambio se da un respiro en el quehacer diario, con lo que se produce la salvación de un mes para los establecimientos hoteleros, que pasan de estar al 35% de ocupación, o menos, al 80% o incluso más, depende de en qué partes.

Mirando desde la perspectiva religiosa y el recogimiento de la pasión, la palma se la llevan en Castilla-León, en Valladolid, Zamora y la mayor parte de las capitales de provincia que lucen sus verdaderas “joyas” artísticas, en medio de un recogimiento casi sepulcral. Aquí se vive la pasión íntegramente.

Mezclando las perspectivas religiosas y folklóricas, Andalucía está a la cabeza, muy por encima de cualquier otra región, y en muchas ocasiones uno no sabría donde comienza lo religioso y donde se entremezcla con los folklórico en Sevilla, en Granada o en Córdoba.

Hemos de ser realistas y ver en ese entrecruzamiento del folklore y la piedad algo que escapa y supera al carácter verdadero que se presenta, de ordinario, en Andalucía, pero que aquí, mejor que en ninguna parte se sabe vestir y conjugar esa doble perspectiva que lo hace más atractivo para muchos visitantes que, estos días, se desplazan por toda la Comunidad Autónoma Andaluza.

Luego, además de la doble visión que hemos dado de la Semana Santa, en Castilla y en Andalucía, están esos lugares que atraen por su clima y que en un año como éste, tratar de asentarse, aunque sólo sean tres días, en una playa al sol, sin preocupaciones de otro tipo, hacen que esos lugares, para muchos de sus visitantes, se conviertan en las mismas puertas del Paraíso.

En este apartado hay que colocar, antes que nada, a Benidorm, esa ciudad que surge en los últimos 60 años y en la que, junto a muy pocos nativos, hay miles de visitantes que le dan un carácter cosmopolita, como no se aprecia en otros lugares. También, libre de lo piadoso o lo folklórico, a secas, encontramos todo el territorio canario, reclamo de españoles, de alemanes, de franceses o de ingleses, por ese “seguro” de buena temperatura, sin preocuparse el personal de si se trata de la Semana Santa o de la Navidad y preocupándose, sólo, por encontrar una buena temperatura.

Intencionadamente, he dejado para el final Ceuta, en unas fiestas como éstas, en las que, a pesar del cruce permanente de cuatro culturas, la Semana Santa cristiana se vive con el rigor de la de Valladolid y con la alegría de la Semana Santa de Andalucía.

En los muchos años que llevo en Ceuta, he vivido pocas Semanas Santas aquí, pero lo que sí detecté esas pocas veces que disfruté de la Semana Santa de Ceuta, es que parece que las demás culturas apoyan con su presencia o con su “no oposición” unas fiestas que, también, y esto no lo debemos olvidar, son reclamo para muchos foráneos.

Si el tiempo acompaña, después de tantas lluvias, la Semana Santa de Ceuta podrá equipararse a cualquiera de las que hemos considerado de las buenas, especialmente, también, en el capítulo turístico, algo que, como hemos dicho muchas veces, todavía no se ha logrado encarrilar, de verdad.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto