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El próximo lunes 19 es la fecha prevista para la firma de
las actas de inicio de la obra que supondrá el sellado del
ya clausurado vertedero de Santa Catalina y su conversión en
un parque suburbano. El momento de arranque de esta
importante actuación, con un presupuesto de 7,8 millones, se
ha decidido una vez nombrada la dirección facultativa, que
ha correspondido a técnicos de la sociedad de Fomento
Procesa. Para rebajar la cota del basurero se trasladarán
unos 250.000 m3 de residuos.
El inicio de las obras de
conversión del vertedero de Santa Catalina en un parque
tiene ya fecha: la firma de las actas se ha previsto para el
próximo lunes, día 19. Así lo señalaron ayer desde la
sociedad de Fomento Procesa, a cuyos técnicos -arquitecto y
arquitecto técnico- ha correspondido la dirección de obra.
Una vez completado el trámite administrativo, podrá comenzar
a desarrollarse el plan de trabajo previsto por Dragados,
adjudicataria del proyecto para la ‘Ejecución, Estudio de
Seguridad y Salud y Estudio de Impacto Ambiental y
realización de las obras de traslado, sellado y
acondicionamiento del antiguo vertedero de Residuos Sólidos
Urbanos de Santa Catalina’.
Traslado de basura
El primer paso de esta actuación,
con un presupuesto de 7,8 millones de euros y un plazo de
ejecución de 12 meses, supondrá el traslado de unos 250.000
metros cúbicos de basura al barranco de las Cuevas, una
vaguada natural situada en las proximidades, justo detrás
del crematorio hindú. El objetivo es rebajar la actual cota
del basurero para situar el parque, con zonas a distintos
niveles, en la plataforma resultante.
En la memoria del proyecto de
urbanización que dará lugar al parque, su autor, el
arquitecto Jorge Chaves, rrecoge que "concluida la fase de
sellado del antiguo vertedero de Santa Catalina, con el
traslado de parte de los residuos al barranco de las Cuevas,
se habrá resuelto la problemática medioambiental que es el
principal objeto del proyecto, llevándose a cabo a
continuación la construcción de un nuevo parque suburbano en
la superficie resultante, de unos 66.489’08 metros
cuadrados".
A este terreno "alterado" se le
dará un tratamiento "con el aspecto y composición vegetal lo
más parecida posible a la existente antes de las obras o a
la vegetación potencial". Para ello se prevé la utilización
de especies autóctonas, "adaptadas a las condiciones del
medio en que se actúa", lo que facilitará el éxito de los
tratamientos y al mismo tiempo reducirá los costes de
mantenimiento. El parque se poblará así de árboles de hoja
perenne y caduca y de arbustos, así como de gramíneas y
leguminosas, rastreras, etc y se crearán "golpes de árboles,
bosquetes de árboles con matorral, setos en paisajes
agrícolas" y otro tipo de composiciones.
Por su parte, en el barranco de
las Cuevas, que en la actualidad está poblado principalmente
de eucaliptos, una especie introducida, se plantarán una vez
trasladados y sellados los residuos, se plantarán pino
piñonero, y como arbustos y matorral bajo, palmito, mirto,
lavanda, amapola marina y retama, en una superficie de
20.120 m2.
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medio ambiente
