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El representante del Ministerio Fiscal en la ciudad solicitó
ayer 15 meses de prisión y la correspondiente indemnización
a las supuestas afectadas para un hombre por un presunto
hurto en el edificio sindical. El acusado negó los hechos y
sostuvo que ayudó a la Policía a recuperar los objetos
alegando que vio a la persona que realmente cometió el robo.
El titular del Juzgado de lo Penal número dos sentó ayer en
el banquillo de los acusados a un hombre por un presunto
hurto en las aulas de formación del edificio sindical y por
el que el representante del Ministerio Fiscal en la ciudad
solicitó 15 meses de prisión y la correspondiente
indemnización para las denunciantes. Por su parte, el
letrado de la defensa pidió la absolución de su cliente
entendiendo que él mismo había visto a la persona que había
cometido el hurto ayudando después a los agentes de la
Policía Local a recuperar los objetos.
Los hechos se produjeron el 15 de marzo en el aula docente
de UGT cuando dos trabajadores detectaron la falta de un
bolso de una de ellas y el monedero de la otra sin haber
visto al acusado por las instalaciones durante el día de los
hechos sino en anteriores ocasiones ya que “él venía para
recoger la basura y nos decía que estaba en el Plan de
Empleo”.
Por su parte, el acusado mantuvo que estuvo en el edificio
sindical buscando asesoría jurídica y que vio a la persona
que sustrajo dichos objetos. “Vi a un indocumentado salir
del edificio con un bolso de mujer que guardó en el chandal
y se le calló el monedero que yo recogí. Luego lo perseguí y
vi cómo tiraba el bolso en un contenedor de La Marina, así
que a las tres de la tarde, cuando la Policía vino a mi
casa, los llevé al sitio para recuperar las cosas”, indicó
el procesado. En calidad de testigos, acudieron al juicio
dos agentes de la Policía Local que aseguraron haber
encontrado el imputado ese día, sobre las 16:00 horas en la
Plaza de la Constitución con el monedero. “La denunciante
era mi hermana y me indicó su aspecto físico así al verlo,
procedimos a identificarlo, en un cacheo encontramos el
monedero, que reconoció haber robado. Además, percibimos que
se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia
estupefaciente”, explicaron los testigos.
El juicio quedó visto para sentencia.
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