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El Día Nacional del Donante se celebra hoy sin que el nuevo
hospital ceutí haya logrado una sola donación de órgano
desde su apertura. La coordinadora de trasplantes, Irene
Martínez, achacó este bajo índice de donaciones a las
escasas muertes por traumatismo craneoencefálico y el
rechazo a la donación de la numerosa población musulmana.
Sin embargo, la asociación Alcer subrayó la solidaridad de
los ceutíes.
España celebra hoy el Día del Donante y los colectivos de
pacientes que requieren de algún órgano o tejido en Ceuta
pondrán todo su empeño en sensibilizar a la población sobre
la necesidad de aclarar con los familiares si desean ser
donantes o no. Las cifras apoyarían en cierto modo esta
preocupación. Según la coordinadora de trasplantes del
Hospital Universitario de Ceuta, Irene Martínez, en lo que
se lleva de 2010 no se ha registrado en la ciudad ninguna
donación de órganos. “Es una tónica general, en Ceuta hay
pocos protocolos porque se producen muy pocas muertes por
traumatismo craneoencefálico y por el alto índice de
población musulmana, que se niega a la donación por motivos
religiosos”, señaló Martínez. Cabe destacar que, en cambio,
sí existen numerosos musulmanes receptores de órganos.
En todo caso, desde la asociación de pacientes renales Alcer,
su presidenta, Mercedes Medina, muestra una visión más
entusiasta y recuerda que en la ciudad autónoma se han
presentado casos de donantes multiorgánicos y también
personas que se han prestado a ello pero que sin embargo no
han podido donar por tener el órgano afectado.
Alcer promoverá una campaña para pedir a la gente que
mantenga una conversación de un minuto con sus familiares
para dejar claro si se quiere ser donante o no. A pesar de
que según la legislación vigente todo el mundo es donante de
órganos al fallecer si no se demuestra lo contrario, la
única forma de atestiguarlo es preguntando al respecto a los
familiares más cercanos. En España, el 17% acaba negándose.
Las donaciones de personas vivas pueden compensar la
disminución de aquellas procedentes de accidentes, aunque
algunos enfermos renales se han negado a recibir el riñón de
su familiar.
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