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Muchos melillenses están esperando que se permita el
acceso Horcas Coloradas para poder disfrutar de una playa a
mar abierto y con una extensión importante. En un primer
momento estaba previsto que la franja de arena tuviera una
longitud de unos 900 metros -por unos 40 de ancho-, sin
embargo este espacio va a quedar reducido prácticamente a la
mitad. El motivo: delimitar parte de la playa por motivos de
seguridad, según confirmó a MELILLA HOY el consejero de
Medio Ambiente, Ramón Gavilán.
Ante esta situación, desde la Consejería de Medio Ambiente
ya se ha solicitado a la Administración central un documento
en el cual se especifique el terreno que va a ser acotado.
De esta manera se sabría hasta dónde estará permitido el
baño y la zona concreta en la que habría que habilitar los
servicios de salvamento y limpieza, tal y como ya existen en
otras partes del litoral.
Según explicó Gavilán esta petición ya se realizó en su día
en una reunión mantenida con responsables del Ministerio de
Medio Ambiente en el pasado mes de abril. Sin embargo, la
Consejería quiere que todo quede por escrito, y por ello se
remitió, apenas unos días después de la reunión, una carta
donde se recordaba su solicitud. Dado que no se contestó a
la misiva, el consejero decidió enviar otra, insistiendo en
la petición, tras la cual hubo una nueva reunión.
Aun así, todavía se desconoce el sistema que se empleará
para delimitar la zona, tanto en la arena, como en el agua.
Eso sí, desde la Consejería se espera que, al margen de como
se haga, se instalen carteles donde se digan que el baño y
estar en la arena es esa zona está prohibido.
Esta no la única solicitud que ha hecho la Consejería de
Medio Ambiente a la Administración central. A día de hoy no
hay una línea para el suministro de energía eléctrica que
llegue a la zona ni ningún centro de trasformación, quedando
de esta manera sin iluminar las farolas instaladas a lo
largo de todo el paseo marítimo. “¿Cómo se va a dejar
circular por la noche sin iluminación en una carretera junto
al mar?”, se preguntaba Gavilán, quien de paso recordó que
prácticamente sería imposible contar para este verano con
las infraestructuras necesarias.
y realizar los trámites correspondientes para el suministro.
Según apuntó el consejero, desde la Administración central
ya se ha planteado la instalación de unos grupos
electrógenos para dotar de energía eléctrica a la zona; una
solución que ven con buenos ojos desde la Consejería siempre
y cuando el Ministerio se encargue de su mantenimiento.
Aseos
A lo que sí es imposible de darle una solución para este
verano es al hecho contar con aseos en esta parte del
litoral, similares a los que ya hay en las playas que
colindan con los paseos marítimos Rafael Ginel y Mir
Berlanga, dado que no se han construido colectores
Según apuntó Gavilán, la solución este inconveniente es la
instalación de aseos químicos portátiles, aunque no creen
que se lleguen a instalar más de 3 ó 4 -pensado sobre todo
en el personal de salvamento-; número que podría ser
insuficiente para los ciudadanos que se puedan dar cita en
esta playa, especialmente durante los fines de semana.
Apertura
Lo que tampoco tienen claro en la Consejería de Medio
Ambiente es cuando los ciudadanos podrán disfrutar de esta
nueva playa, dado que aún se está trabajando para finalizar
el proyecto de acceso a Horcas Coloradas.
De hecho, como apuntaba Gavilán todavía no les han
contestado sobre la fecha en la que pueden comenzar a
trabajar para habilitar los servicios de socorrismo y
limpieza.
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