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La presencia de medusas en la zonas de baño está cada año
más controlada. El Ministerio de Medio Ambiente y Medio
Rural y Marino apuntó que las asistencias por picaduras de
medusas en el mes de julio y la primera mitad de agosto no
han superado los cuarenta y que no se han detectado bancos
importantes en el litoral ceutí.
La presencia de medusas en las zonas de baño está siendo
este año significativamente menor, a juzgar por los datos
barajados por la coordinadora de la campaña del Ministerio
de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Sonia Rivera.
La responsable en Ceuta de esta campaña, en la que
participan voluntarios de los cuerpos y fuerzas de seguridad
del Estado y también buzos particulares, indicó que en todo
el mes de julio sólo se habían producido 29 asistencias por
este motivo y que en la primera mitad de agosto no superaron
las siete, lo que da una muestra de su baja incidencia.
Es más, Rivera añadió que no se había detectado este año
ningún banco importante de medusas en el entorno del litoral
ceutí y que todas las picaduras respondían a la acción de
ejemplares aislados. Además, todas ellas vinieron derivadas
de situaciones externas, como la rotura de la red colocada
por la Consejería de Medio Ambiente como consecuencia del
viento y la frotación con espigones.
La consejera Yolanda Bel también ha llamado este año la
atención en las campañas de sensibilización con el cuidado
de las playas sobre los inconvenientes de bajar la red para
saltar al otro lado de lo misma, comportamiento muy propio
de algunos usuarios y que posibilita la entrada de medusas
en la zonas baño.
Entre las medusas identificadas por el Ministerio se
encuentran la aguacuajada, la clavel, la aguamala, la
aurelia, el acelafo radiado, la fisalia, el velero, la
aequorea, cubomedusa, o el ctenóforo americano.
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medio ambiente
