PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales

 

 

sociedad - DOMINGO, 19 DE SEPTIEMBRE DE 2010


Rescate de una balsa con inmigrantes. g.v

inmigración
 

Las mafias encuentran en el mar la clave del éxito para el porte humano

El constante goteo desde las costas del
norte de Marruecos acaban en rescate
de los servicios españoles y en el notable incremento de la acogida en Ceuta, lo que
se achaca a cierta dejación marroquí en
el control de los tráficos de inmigrantes
 

CEUTA
Antonio Gómez

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Más de 300 inmigrantes han llegado hasta Ceuta a lo largo de los meses de verano que están a punto de concluir. Los rescates en las cercanías de las costas de Ceuta ha sido constantes tanto por los servicios de la Guardia Civil como por Salvamento Marítimo. Las Fuerzas de Seguridad españolas han informado que las mafias han encontrado la facilidad, por la dejación de la labor de control en Marruecos, de una ruta ‘segura’ con salida en las cercanías de Perejil, desde donde lanzan a los inmigrantes, conocedores de la rápida labor de rescate de las autoridades españolas. El vecino país , con su inacción, estaría permitiendo el envío de problemas adminstrativos a España en general, y a Ceuta en particular. Este goteo de inmigrantes se percibe como un modo de presión.

Las mafias han establecido un sistema ‘seguro’ para lograr un mayor porcentaje de éxito en el envío que, de los inmigrantes, hacen hacia España-Europa. La idea es hacerlos salir en balsas de plástico a remos para que sean avistados por los sistemas de detección españoles, o bien esperar a que sean avistados en aguas de jurisdicción española. Conocen que la práctica es el permanente salvamento y traslado a orilla segura. Como las balsas se detectan regularmente cerca de las costas ceutíes, el reglamento en el m ar indica que han de llevarse al puerto más cercano. Y ahí está el problema que comienza a originarse en la ciudad y en el CETI en particular, donde los residentes ya superan los 450, casi en el límite de su capacidad natural.

Las rutas que se siguen establecen un pasillo, a través de Marruecos, dirección al norte muchas veces comentado, conocido por los servicios de información españoles, comprobado por la Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía y CNI. Los informes están sobre la mesa en Madrid y harto conocido por las autoridades españolas. Marruecos controla como quiere la progresión de la inmigración subsahariana y endurece o afloja la presión sobre ella en función de posturas bilaterales hispanomarroquí. A la vista está, poco importa que los subsaharianos comiencen a dar problemas a la Administración por su estancia en Ceuta. El hecho de que la ciudad autónoma origine dolor de cabeza podría ser una estrategia definida.

Si bien la postura oficial es de leal colaboración en asuntos tan prioritarios para Europa y España, y el propio Marruecos, como es el terrorismo y el narcotráfico, la inmigración adolece de esa tarea de mayor control y queda sujeta a la coyuntura del momento. En el verano 2010, que está a punto de acabar, el goteo de salidas desde las costas del norte, próxima a Perejil y a la famosa bahía donde se asienta la antigua Playa de la Avioneta -ahora ocupada basicamente por el super puerto de Tánger Med-, ha sido y es aun constante. En la última semana más de veinte personas con origen en el entorno del Sahel, han sido rescatados bien por la Guardia Civil, bien por los servicios de Salvamento Marítimo.

Problema para Ceuta

Las mafias encuentran cierta parsimonia de las fuerzas de seguridad en la zona de Tánger, lo que facilita su labor en el ‘lanzamiento’ constante de hombres, menores y mujeres, por mar con destino seguro en las embarcaciones de rescate españolas.

Como previsión, el Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes (CETI) podría incrementar su número de plazas en “50 ó 60” si el goteo de subsaharianos que llega hasta Ceuta no cesara hasta finales de año y llegase a completar el aforo del recinto, donde, al parecer, existen locales desde hace 4 años que podrían ser habitados.

Sólo en los tres meses que comprenden la temporada estival (junio, julio y agosto), unos 300 inmigrantes han accedido de forma ilegal a Ceuta y, por consiguiente, han sido derivados al Centro de Estancia Temporal de la ciudad, donde actualmente se encuentran alojadas, tras las últimas llegadas en esta semana, unas 455 personas.

Un número que se puede considerar alto si se tiene en cuenta que la capacidad completa del centro ronda las 512 plazas aunque, al estar divididas por núcleos familiares, desde el CETI estiman que el aforo completo podría situarse entre las 490 y 500 plazas, tal y como afirmó el director del mismo, Carlos Bergoenchea. Es decir, casi en el límite. Un problema que se le viene a Ceuta encima teniendo en cuenta, sobre todo, que las garantistas leyes de nuestro país, las que nos hemos otorgado todos, evita maniobras de la Administración tendentes a la conservación de un estatu quo que en Ceuta resulta, por necesario, vital. La densidad es elevada y la afectación sobre la población ya es notoria.

Los contactos españoles con los países subsaharianos tiene sus altibajos. Camerún no está por la labor y sus nacionales, que no reconoce, son el germen del conflicto en Ceuta. Problema para la ciudad, dolor de cabeza para España, ¿logro para Marruecos?.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto