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El patrón del barco y el tripulante marroquí que fueron
detenidos en agosto por los agentes de la Benemérita después
de que interviniesen 100 kilos de resina de hachís en su
pesquero no serán juzgados hasta enero. El juicio sobre la
denominada operación ‘Caballa’ estaba previsto para ayer
aunque los guardias civiles que intervinieron en el muelle
no pudieron acudir a la cita por lo que esta quedó
suspendida.
Los dos detenidos en la operación ‘Caballa’, iniciada por la
Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil y
enmarcada dentro de la lucha contra el tráfico de drogas, no
serán juzgados por el delito contra la salud pública que les
imputa la Fiscalía hasta enero. El juicio, que estaba
previsto para ayer, tuvo que ser suspendido ya que algunos
de los agentes de la Benemérita que participaron en el
operativo desplegado en el muelle no pudieron acudir a la
cita, que se celebrará el próximo 10 de enero.
La operación ‘Caballa’ culminó el pasado 16 de agosto con la
aprensión de 100 kilos de sustancia estupefaciente en un
pesquero que se encontraba atracado en el puerto de la
ciudad, y la detención del patrón del barco y un tripulante
marroquí en el mismo muelle, sentados ayer en el banquillo
de los acusados del Juzgado de lo Penal.
Mediante la explotación de dicha operación, la Benemérita
tenía conocimiento de la posible utilización de barcos
pesqueros, con base en el puerto de la ciudad autónoma, para
pases de droga. Tras un constante seguimiento, los guardias
civiles procedieron a la intervención del pesquero, provisto
de matrícula de Ceuta. Este tenía fondeada a babor la
cantidad aproximada de 100 kilogramos de resina de hachís,
que se mantenía sumergida mediante la utilización de pesas
que impedían que pudiera emerger hacia la superficie.
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