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Me pregunto. Porque soy de
naturaleza curiosa y me encanta enterarme de lo que no sé. Y
que me expliquen lo que no llego a comprender, por mucha
lógica cartesiana que le inyecte al invento.
Me refiero a la Coalición Marxista-Musulmana que es la
denominada “Caballas”. A la coalición y al tema del Sahara,
al conflicto guerracivilista entre la población autóctona de
El Aiún y los marroquíes que llevan allí treinta y tantos
años instalados. Pero a quienes, la progresía y la izquierda
pro-saharaoui, sigue llamando “colonos”. Es bien sabido que
la izquierda española, es decir, los partidos y los
sindicatos de izquierdas, léanse los refinados Ugetistas y
los de Comisiones Obreras de toda la vida, han sido
rabiosamente “Pro- Sahara libre” y manidasconsignas por el
estilo, en las que se suele atacar con especial ensañamiento
al Monarca de Marruecos, a quien dedican todo tipo de
epítetos espantosos. De hecho, los de las Plataformas para
el Pueblo Saharaoui gozan de gran predicamento entre la
progresía y los comunistas de Izquierda Unida se chalan por
ellos.
Lógico entonces que la postura de una de las partes de la
extraña y poco sincronizada Caballas, concretamente el
representante de Comisiones Obreras, el comunista Aróstegui,
sea pro-Aminatú y pro manifestaciones en las puertas de los
edificios oficiales españoles por parte de los escasos
saharaouis que viven en España, más el plus de los
izquierdosos reivindicativos y los antisistema, con quema de
banderas marroquíes incluida. Si Aróstegui es de Comisiones
comulga con el ideario de IU punto por punto y los suyos
están corre que te pillo para entrar en El Aiún en plan
“caravana solidaria” y si les dan un cantazo en la boca
pedirán al Gobierno Español una “indemnización”. Al tiempo
que quedan un par de telediarios para comenzar a hablar de
las torturas y genocidio en el Sahara. Todo muy en plan
exaltación del derecho de los pueblos a decidir su destino.
Y, una vez decidido y repartido el pastel entre los cuatro
listos vestidos de étnicos con túnica y tal, el derecho de
“los listos” a empezar a mendigar “la subvención” “la ayuda
humanitaria” “la cooperación” “La ayuda al desarrollo” y “la
solidaridad” , es decir, los dineros de los europeos que
madrugan en general y de los españoles que madrugan en
particular, para ellos “sostener el invento” y ponerse
sueldazos. Lo que pasa siempre.
Aróstegui ha de ser “Plataforma pro-Sáhara libre” y los
musulmanes a quienes representa Mohamed Alí, que me parecen
bastante menos arrebatados y más sensatamente pragmáticos,
han de estar del lado del Gobierno Marroquí y de la postura
de Mohamed VI. ¿Es así o no es así?.
En el tema del Sahara no caben medias posturas ni soluciones
que tengan dos caras como las lentejas. O se está al lado de
Marruecos o se está contra Marruecos. Es un asunto bastante
lineal, a favor o en contra, el resto de las explicaciones
son medias tintas y tratar de mear sin desabrocharse la
cremallera de la bragueta, alegando cobardemente que caben
posturas intermedias. Aróstegui tiene que estar a favor de
las Plataformas de tipos con túnicas que queman las banderas
con la estrella ¿Y Mohamed Alí y sus electores? ¿Son anti-Marruecos?.
Lo mejor es dar una lección de coherencia en este puchero
ideológico que es Caballas y definir claramente la ideología
y la postura de cada cual. Mayormente para no engañar al
electorado y abusar de su confianza.
¿Qué cual es mi postura? Lógicamente la que no cueste dinero
a los atribulados españoles. ¿Qué Sahara fue español? Vale.
Pero ya no lo es. Y nunca, jamás, un pedazo de árido
desierto, merecerá derramar ni la gota de sangre del
padrastro de un dedo de un español. Y además, en plan
práctico, no nos interesa gastar dinero en subvencionar a un
gobierno de opereta saharaoui, más nos interesa reivindicar
de una vez por todas Portugal, Cerdeña y el Reino de
Nápoles, que nos fueron arteramente arrebatados.
Pienso que, con Marruecos como potencia administrativa, los
saharaouis tienen las ventajas que ofrece un Gobierno que,
como el de Marruecos, sabe funcionar y sabe gestionar. ¿Qué
los del campamento desarbolado de saharaouis exigían trabajo
y viviendas? También cinco millones de parados españoles
exigen trabajo y ocho millones de pobres españoles exigen
trabajo y viviendas y quince millones de españoles exigen
viviendas. Por exigir, todos exigimos, pero quienes no
tienen trabajo emigran a buscarlo fuera de sus fronteras.
Como ha sido toda la vida y seguirá siendo.
¿O es que a los miles de españoles, familias enteras, que
tienen que emigrar a la vendimia francesa, muchos después a
Bélgica y otros a Holanda, no exigen que les den trabajo y
casas en sus pueblos? ¿Y los médicos y las enfermeras que
tienen que emigrar a Portugal o a Inglaterra y los
científicos españoles, al mundo entero, no desearían
trabajar en su país?.
La globalización es la globalización. Y el guiso del puchero
cambia según quien. La postura pro-saharaoui del
representante de Comisiones Obreras es clara, porque tiene
que seguir las directrices de su sindicato, pero ¿Cuál es la
postura de Mohamed Alí? Nada de medias tintas ni de
escurrirse por la tangente declamando sobre “referéndum”
“acuerdo entre las partes” y tal Pascual. Para Mohamed Alí,
el Sahara ¿Pertenece o no pertenece a Marruecos? E ahí la
cuestión. Ahora toca responder para que me entere de la
receta del guiso del puchero “a la ceutí”.
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OPINIÓN / ESPAÑA CAÑÍ
