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Podría decir que es algo que no me
va a afectar lo más mínimo, como no me ha afectado en todas
las demás ocasiones en las que hubo subidas, ahora bien,
tengo respeto por todos los fumadores y creo que esta
subida, por pequeña que sea, que no es tan pequeña, puede
hacer que muchos de esos fumadores lo vayan aparcando o
reduzcan el consumo de tabaco.
Veo en la edición del pasado jueves, en El Pueblo de Ceuta,
que la subida del tabaco en Ceuta es más ligera que en
Baleares o en la Península, al final ya veremos.
Y no acierto a comprender por qué un fumador de Ceuta va a
tener ese “privilegio” de que sus cigarrillos aparezcan con
menos subida, que la que tienen los que fumen en mi pueblo o
en Palma de Mallorca, por poner dos ejemplos.
Es difícil comprender todos estos cambalaches que aparecen
en ciertos productos, mientras que en otros que eran,
tradicionalmente, mucho más baratos, poco a poco se van
equilibrando con los precios de la Península.
En la información sobre esta subida del tabaco, se dice que
tanto en Baleares, como en la Península, hay una orquilla de
esa subida que va de 0,30 a 0,40 céntimos, mientras que en
Ceuta la subida está entre 0,15 y 0,30 céntimos.
Una vez visto esto, entramos en otro aspecto que no sé qué
explicación pueden darnos desde los correspondientes
organismos, que abordan la cuestión de los precios, porque
no hay explicación posible para que una cajetilla de
Marloboro, por ejemplo, cueste 4,25€ en Algeciras, Cádiz, La
Coruña o Palencia y que en Ceuta cueste 2,70€.
Por muchos más impuestos que se paguen en la Península, una
cajetilla de tabaco no puede pagar tantos impuestos como
para que haya una diferencia tan abismal como la que hay
entre Ceuta y Algeciras.
La medida esta de la subida se aprobó el pasado viernes, día
3, de este mismo mes y parece que ha pasado como cubierta
por una nube, por cuanto en todos esos días con el conflicto
de los controladores aéreos, buen cuidado han tenido, desde
los organismos correspondientes para no hacer demasiada
publicidad hasta que los precios no estuvieran en los
estancos.
Y a toda esta serie de irregularidades que venimos citando
hay que añadir otras más, como es el hecho de que hayan
subido los precios de unas marcas, mientras que otras, muy
corrientes y conocidas, todavía no se sabe ni cuanto, ni
cuando van a subir, o si se quedarán en los mismos precios
que tenían.
Mirándolo con frialdad y desde la perspectiva de alguien que
no fuma y al que no le va a afectar para nada, me parece
otra chapuza más, otro juego que discrimina a unos respecto
de otros y que no da seriedad, en absoluto, a uno de los
productos que, perjudique o no, también representa un
capítulo importante de ingresos para las arcas de la
Administración.
Mirando los precios, en estos momentos, en Ceuta no
encontramos cajetillas de ninguna marca que se acerquen a
los 3 euros, mientras que si saltamos al otro lado del
Estrecho tenemos marcas muy conocidas, pero no de los
tabacos más caros, como Fortuna o Nóbel que están en 3,85€,
Ducados en 3,75€ y muy por encima de todos estos, Marlboro
en 4,25€.
Con estos precios, aunque parezca una pesadez, estamos
incitando a que la gente deje de fumar o les estamos
diciendo que fumar es hoy un lujo.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
