PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - DOMINGO,16 DE ENERO DE 2011

 

OPINIÓN / EL MAESTRO

Recortes en educación
 


Andrés Gómez Fernández
andresgomez@elpueblodeceuta.com

 

No era el día de los Santos Inocentes, por lo tanto no se trataba de una “inocentada”. Ni mi información procedía de un medio poco serio. Se trataba de un periódico de amplia tirada nacional, muy fiable, que en su portada nos remitía a páginas interiores, para transmitirnos que nuestro sistema educativo, en este año, iba a recibir serios recortes presupuestarios.

Mala noticia. Malísima. Para el presente año, 2011, nuestra educación dispondrá de 1800 millones de euros menos. Llega, precisamente, en un momento donde el Informe Pisa nos deja, como viene sucediendo en situaciones pasadas, en mal lugar.

El análisis profundo de los resultados del Informe Pisa de la OCDE 2009, da lugar a múltiples conclusiones, teniendo en cuenta que nuestras Comunidades Autonómicas gozan de un singular privilegio, al asumir las responsabilidades educativas y la falta de coordinación entre ellas. Por otra parte, nuestra inversión educativa está lejos del 7% del PIB y por debajo de los países de la OCDE.

Con lo expuesto anteriormente, nos llega los recortes en educación, cuando se supone que se iban a mejorar, pese a la crisis que padecemos, siendo, además, una promesa del Ministerio.

El total del recorte, como se ha dicho anteriormente, se eleva a 1.800 millones de euros y serán, básicamente, los sueldos de los profesores y el resto de los trabajadores de la enseñanza los que más soportarán los recortes. También afectarán, dependiendo de las Comunidades, desde el transporte escolar a las becas universitarias, la formación del profesorado, junto a la publicidad e incluso, la luz y el agua.

Los presupuestos públicos destinados a la enseñanza en 2011, por las Comunidades Autónomas, de quienes dependen más del 80% del gasto educativo, mermarán, al menos en 1600 millones de euros, con respecto a 2010 y algo más de 1800 se incluye la bajada del Ministerio de Educación. Pero se ha de destacar que no en todas se produce por igual la misma bajada de presupuesto (entre 7,9% y 6,5%), en los que más bajan; en el extremo contrario, es decir, donde menos se reduce el presupuesto, entre 4,7% y 4,9%.

Al Ministerio le corresponde la reducción de sueldos de un 5% para los funcionarios públicos y también para los docentes de la privada concertada por el Gobierno Central. Unos salarios que, en el caso de los presupuestos educativos, se comen una buena parte: de media, sólo para la pública, alrededor del 64%.

En tiempo de crisis, recuerdan las Comunidades y toca apretarse el cinturón, también en un área que se ha señalado como uno de los principales motores, precisamente para salir de la crisis. Y en un país, además, según confirma el último Informe Pisa, que tiene que mejorar mucho más rápido para alcanzar los resultados de los mejores sistemas y que aún están por debajo de la media del gasto educativo de la OCDE.

El Informe Pisa revela que en 10 años se han movido muy pocas cosas en el Sistema Educativo en España. Quizás esa “calma chicha” sea el peor síntoma de la mediocridad.

Un país que no aprecia el esfuerzo educativo desde el origen del mismo, de la enseñanza, no logrará alcanzar sus objetivosCon buenas ideas, sin llevarlas a la práctica, tampoco. Invertir en enseñanza, en cultura, en ciencia, sirve para atacar el núcleo duro de la crisis. Los pactos de Estado, que entendemos imprescindibles, podrían empezar por la enseñanza. Y lo demás, son sólo excusas, por lo tanto dejémonos de justificaciones.

Los pilares de una sociedad de progreso sirven para protegernos de futuras crisis. Otros países más avanzados, hace tiempo que se dieron cuenta de ello. De modo, que cuando esta crisis llegó, recortaron gastos de muchos sitios, exceptuando educación, sanidad e investigación. Para cuándo nuestros responsables se darán cuenta de estas circunstancias.

Sin embargo, la mayoría de la administraciones han intentando salvar de la quema, al menos en parte, a la educación, reduciendo sus presupuestos, menos de lo que ha hecho el global de sus cuentas generales para 2011, e intentando, aseguran las consejerías, que los recortes no afectan a la calidad de la educación, aumentando incluso en algunas partidas.

Lo que sí es cierto, que si se ha conseguido mantener la calidad de sistema educativo, a pesar de los recortes, o no, se verá a lo largo del año. Y conviene tener en cuenta que cuando se llega a la Presidencia de una Autonomía, se repite hasta la saciedad que la educación es prioritaria. Después, ya vemos los resultados.

Pero la realidad no es otra que, la poca inversión en materia educativa es, sin duda, una de las causas en la que coinciden todos los Sindicatos y Asociaciones. De hecho el presupuesto de Educación (6.145 millones de euros) sigue muy lejos de la media de OCDE, situado, como ya he citado anteriormente, en el 7%, del gasto público. En algunas Autonomías no se llega al 5% y, además, la inversión por alumno varía de una autonomía a otra, y se encuentra entre 4.000 y 5.000 euros.

Es previsible, que en aquellas Autonomías donde el recorte se acentúa más que en otras, se produzca el previsible recorte de plantilla, de nuevas ofertas de estudios, limitación de desdobles o de la atención a la diversidad y, lo más preocupante, un incremento en muchos centros de la ratio de alumnos por profesor. Todo ello en perjuicio de la pública, por lo que se produciría una fuerte huída hacia la privada o concertada. En suma, un grave despropósito este inoportuno recorte en Educación.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto