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El pasado verano de 2010, la Policía detuvo a un hombre por
la presunta comisión de tres robos en viviendas de la
Ciudad, dos pisos y un chalet. En todos los casos, el
arrestado entraba por las ventanas o balcones y cuando
estaba en el interior se hacia con todos los teléfonos
móviles, relojes, joyas y dinero que encontraba a su paso.
La Audiencia lo iba a juzgar ayer, pero aceptó la condena
que le solicitaba la fiscal. Cumplirá cinco años por tres
delitos consumados y una tentativa.
La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Cádiz en
Ceuta condenó ayer a un hombre a cumplir 5 años de cárcel
después de que protagonizara en julio de 2010 tres asaltos a
viviendas en la ciudad a las que accedía escalando las
fachadas y entrando por las ventanas. Los robos se
produjeron en casas de la Avenida del Ejército Español, la
calle Real, donde el condenado entró por un balcón, y en un
chalet de Lomas del Pez.
El hombre que fue juzgado ayer, F.R.Q, obtuvo un botín
compuesto por joyas, relojes, teléfonos móviles y pequeñas
cantidades de dinero. La vista se señaló en la Audiencia por
tres presuntos delitos consumados de robo con fuerza en casa
habitada y escalamiento y un delito de tentativa de robo. El
acusado aceptó la petición de pena propuesta por la fiscal
del caso, de forma que fue condenado por su conformidad con
los hechos. La calificación fue rebajada ya que inicialmente
se le imputaba también un delito de allanamiento de morada.
Anteriormente, en la instrucción del caso, el acusado
declaró que no recordaba los hechos que le imputaban porque
tomaba fármacos muy fuertes y eso le impedía acordarse de
todo.
El abogado defensor intentó alegar una atenuante de
drogadicción, pero no logró demostrar esa adicción porque
cuando procesalmente correspondía hacer la prueba no tenía
pelo en la cabeza para extraerle y poder hacerla. Se da la
circunstancia de que también en julio de 2010, fue detenido
otro asaltante de pisos, este último tras una persecución de
madrugada en la playa de La Ribera. Había entrado a un piso
de la calle Independencia y al ver a los dueños pidió perdón
y huyó a la carrera.
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sentencia
