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Veo que un titular de El Pueblo de
Ceuta, del 28 de este mismo mes de marzo, dice así:” Los
seis guardias civiles acusados de prevaricar irán a juicio
el 31 de marzo”.
Esto no me gusta y además esto no debe manchar la imagen de
la Guardia Civil, pero que sean seis es ya demasiado.
Claro está que en todos los grupos profesionales puede
aparecer un garbanzo negro, lo malo es que estos 6
conformarían todo un “cocido” que a muy pocos nos gustaría
tenerlo que comer.
Y que las cosas no deben ser de un simple juego nos lo
demuestra el hecho de que La Fiscalía pida 4 años de cárcel,
inhabilitación durante 9 y 1200€ de multa para “los
imputados”.
La cosa no viene de ahora, sino que la imputación de delitos
de cohecho y prevaricación se remonta a hace 8 años, allá
por mayo de 2003.
Ahora bien, uno no entiende como un proceso de este tipo
puede haberse demorado tanto, porque de ser cierto lo que se
les imputa, desde aquel momento, hasta ahora, los desatinos
podrían haber llegado “ad infinitum”.
Y es que, al parecer, sólo eso, “al parecer”, estos
procesados dejaban pasar por la frontera mercancías y
viajeros sin control.
Y esto último, según la propia Guardia Civil, debe ser
grave, al meno si nos atenemos a la seriedad con que un “ya
veterano” guardia civil se me encaraba, a mí personalmente,
al ir a pasar el control de vehículos aquí en Ceuta, en la
noche del 23 de febrero pasado, cuando me dirigía a embarcar
en el ferry de Balearia de las once y media de la noche.
No dudo lo más mínimo que estuviera ese guardia civil,
veterano él, en su derecho para ponerse tan serio conmigo,
puesto que yo llevaba el cristal de la ventanilla de mi
coche subido, cuando llegué a ese control, pero de ahí a :”
usted tiene que atender ante un control de la Guardia
Civil”, con que me recibió al ir bajando yo el cristal, me
parece algo que no tenía ni tiene razón de ser, puesto que
ni entonces, ni nunca he desoído cualquier indicación de un
agente.
Pero así son las cosas, como digo, unos se ponen muy serios,
por casi nada, y otros actúan como compadres, por mucho más.
Sea como sea, la Guardia Civil es otra cosa y en nada son
reflejo esos seis “presuntos” o este “cumplidor a
rajatabla”.
Lo que sí parece raro, y sigo con la información de El
Pueblo de Ceuta, es que, al parecer, un marroquí pagó 41€
para que le dejaran entrar a Ceuta con un carné de conducir
no válido.
Me cuesta trabajo creer eso, porque además de no cumplir con
su “sagrado” deber, lo dejaba de cumplir por unas migajas
que, a buen seguro, no necesitaba, al menos de esa forma.
El Ministerio Público, en su escrito de acusación, expone:”
puestos en común y previo acuerdo, urdieron un plan con el
ánimo de enriquecerse injustamente y con dicha finalidad
decidieron desarrollar el ejercicio de sus cargos a cambio
de cantidades de dinero u otros beneficios en especie”.
Mal asunto éste, si es que ha sucedido así, porque si ahora,
a estas alturas vamos a tener que desconfiar de “parte” de
la Guardia Civil, en casos de este tipo, es que podríamos
decir que aquí se puede comprar y vender todo, cosa que, a
mí personalmente, no me encaja, de ninguna de las maneras,
con este cuerpo al que respeto y he respetado siempre. Aun
en el caso de que sea cierto el fondo de esas acusación, son
seis, no es la Guardia Civil.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
