OPINIÓN - MIÉRCOLES, 4 DE MAYO DE 2011

Rajoy en Ceuta: cita con el entusiasmo

Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com
 

Actuó como telonera de postín Yolanda Bel dando paso con palabras emotivas a los dos Presidentes, al de Ceuta y al futuro Presidente de la Nación, frases de gratitud e irrupción estelar de Vivas acunado por los aplausos.

No existe mejor denominación para calificar a quienes acudieron a la cita con el próximo inquilino de la Moncloa, Mariano Rajoy que la de “afines y entusiastas”. El gran salón del hotel Ulises desbordante de un público encantado y entregado. Y como siempre que el Partido Popular convoca, faltaba espacio, faltaban sillas, faltaba oxígeno y no sobraba absolutamente nadie, porque incluso quienes no pudieron acceder al acto y tuvieron que conformarse con escuchar las intervenciones apelotonados en las puertas de acceso, participaron con entrega de cada frase que allí se emitió, se congratularon con el corto espacio que nos queda hasta el triunfo del próximo 22 y murmuraron discretamente plegarias y jaculatorias susurradas rogando un adelanto electoral que permita a toda España verse libre de los bichos que nos gobiernan (y se vengan de los españoles a fuerza de leyes restrictivas para escarmentarnos por hundirles a nivel sondeos).

Actuó como telonera de postín Yolanda Bel dando paso con palabras emotivas a los dos Presidentes, al de Ceuta y al futuro Presidente de la Nación, frases de gratitud, intervención breve pero densa en contenido y la irrupción estelar de Juan Vivas acunado por los aplausos de los fidelísimos peperos, que son muchos y estaban llenos de contento por la ocasión. Público variopinto y anhelante por recibir una buena rociada de optimismo, una dosis de ozonoterapia político-intelectual, ansioso por “respirar” en esta realidad social española que es una realidad triste donde se desconfía de quienes mandan porque se les sabe malos e ignorantes.

Vaharada de positivismo con la intervención de Juan Vivas, el del discurso medido y cuadriculado: esto es esto y se resuelve así. A cada problema una solución. A cada pena un remedio. Un buenísimo Gobierno para una buenísima ciudad en la que repercute, como en el resto de la desdichada España, la calamidad de tener un pésimo Gobierno de la Nación. Elogiable la exposición made in Vivas de nuestra realidad ceutí y del proyecto coherente y factible que presenta el Partido Popular, un proyecto de puntos meditados y estudiados, profundamente realista sin ni un ápice de concesión a histrionismos de profesionales de la mala demagogia. Medidas económicas enjaretadas por un buen economista, incentivos, bonificaciones, reclamos financieros de todo tipo para atraer el dinero y la prosperidad a Ceuta y a sus ciudadanos.

El programa del PP es antes que nada una especie de tesis doctoral sobre factores económicos y de crecimiento. Y como el pueblo “sabe y siente” que hacen falta grandes profesionales para arrear con la gestión pública, atiende a las disertaciones con en general con satisfacción. Y no he escrito “todos y siempre” porque hubo un “renuncio” del Presidente Vivas que comenzó a enfurecernos pero que quedó en nada porque se apresuró a conformar al personal.

Fue su alusión a “las nieves del pasado” que uno de mis poetas predilectos François Villon llamaba “les neiges d´antan” en un gracioso poema en el que se hacía referencia a un pobre hombre llamado Buridan que era arrojado en un saco al Sena y se preguntaba Villon ¿Pero donde están las nieves de antaño?. Y concretamente se refirió a su encanecido bigote y a su edad postadolescente de cincuenta y ocho años y yo le digo “¡Averguéncese Vivas!”. ¿Es que no sabe que con las nuevas técnicas y con la medicina ortomolecular se garantiza una perfecta longevidad cerebral hasta los cien años? ¡Durante los próximos veinte o treinta años ni sueñe con escaquearse!. El Presidente tranquilizó al personal y se declaró dispuesto a continuar con una carrera política que, realmente, no ha hecho más que empezar.

Y de Vivas al próximo inquilino de la Moncloa, el marido de la linda Viri, futura primera dama, Mariano Rajoy. Que gana en las distancias cortas y se supera en las largas, sobrado en todos los aspectos, con las ideas preclaras y los extremos del programa que sacará a España de la miseria bien masticados y arduamente refexionados, análisis minucioso y posterior síntesis, lo primero España. Sobrado. Ovación.

Aznar dejó a España con un paro testimonial cuando se encontró con un 26% de población activa desempleada tras el felipismo, “estos de ahora” han derrochado por ignorancia e incompetencia el patrimonio de todos los españoles, nos han endeudado hasta extremos inauditos y han superado con creces en estulticia a sus antecesores políticos. Y encima son mentirosos. O tal vez no son mentirosos sino fantasiosos e irreales y cuando la Nación se hunde se dedican a fabricar cortinas de humo legislando contra los ciudadanos para distraer la atención de lo esencial: que nos han hipotecado como país.

Rajoy “pide” un millón de emprendedores españoles capaces de generar empleo (supongo que esto conllevará un duro correctivo a los bancos), el empleo genera consumo, el consumo genera riqueza y productividad, las Pymes se refuerzan y España respira y recupera la perdida capacidad de ir de tú a tú con el resto de las economías de la UE. Magnífica y academicista intervención muy similar a la exposición de una tesis doctoral sobre economía y mercados, sobre esperanza de futuro y antes que nada el guiño directo a los principios y postulados de ese Humanismo Cristiano, descendiente del judeocristianismo, de la filosofía griega, del derecho romano, del misterio de las catedrales y de nuestro Renacimiento: el ser humano centro de la creación.

Antes que las ideas el valor del individuo per se, una belleza de alusión filosófica centrada en el que a nadie se le pregunta de donde viene sino adonde va y si quiere venirse a ese sitio con nosotros, caminar y andar juntos el camino del poeta y del sabio, de la España que madruga y de la España que espera una regeneración que se otea en el horizonte.

También una promesa porque conoce, siente y sigue la realidad de Ceuta: que regresará como Presidente del Gobierno. Y lo ha prometido, por mucho que el ínfimo desliz de pedir apoyo para Juan Vivas haya sido interpretado por los de UPyD en forma de inmediata correndija para “denunciar” ante la Junta Electoral y supongo que al tiempo aprovecharían el paseo para contratar la cabina telefónica cerrada en la que celebran sus multitudinarios actos electorales y aún les sobra espacio. “Pequeñas infamias” lo titularía la inteligente Carmen Posadas, pura ruindad lo titulo yo y envidia pura y dura porque nadie podrá opacar la promesa de nuestro próximo Presidente: regresará.

Y le estaremos esperando, porque su promesa no describe la realidad sino que “crea” la realidad, le estaremos esperando, de hecho ya, ahora, le esperamos...