| 
                     
					La Guardia Civil ha localizado en Melilla a una inmigrante 
					embarazada que accedió a la ciudad oculta en un doble fondo 
					construido en el salpicadero de un coche procedente de 
					Marruecos, que fue abandonado por su conductor tras darse a 
					la fuga. 
					 
					Según informó ayer el instituto armado en una nota, el 
					vehículo cruzó la frontera de Beni Enzar, el principal 
					puesto fronterizo de Melilla, donde fue inspeccionado sin 
					que, a priori, se localizara nada, por lo que se le autorizó 
					la marcha. 
					 
					Sin embargo, a cierta distancia, uno de los guardias civiles 
					que habían participado en el registro se percató de un 
					detalle que le hizo sospechar, por lo que le volvió a dar el 
					alto, aunque el conductor no hizo caso y se dio a la fuga. 
					 
					Inmediatamente, se inició la búsqueda del vehículo, que fue 
					localizado poco más tarde en una calle de Melilla, 
					abandonado y con las puertas abiertas. 
					 
					Iniciado un nuevo reconocimiento, se apreció una posible 
					modificación en la parte interior del motor, lo que aumentó 
					las sospechas de que podía haberse realizado un doble fondo 
					y que una persona podría estar en su interior. 
					 
					Este hecho fue confirmado al reconocer los bajos del 
					salpicadero tras retirar parte del mismo y palpar un cuerpo. 
					 
					Los agentes procedieron de inmediato a su extracción, para 
					lo cual abrieron una zona en el lado derecho del salpicadero 
					e hicieron palanca para mantener la apertura suficiente, a 
					la vez que se daba aviso a los servicios sanitarios ante el 
					riesgo que podía estar corriendo la persona allí oculta. 
					 
					La inmigrante, en el momento de ser sacada del doble fondo, 
					se encontraba inconsciente, por lo que se le practicaron los 
					primeros auxilios hasta la llegada de los servicios 
					sanitarios que la trasladaron luego al Hospital Comarcal. 
					 
					La mujer estaba “completamente encajada” en un doble fondo 
					donde apenas podía respirar, ya que los autores del mismo 
					habían retirado los sistemas de ventilación y cableado, 
					aunque no en su totalidad. 
					 
					La inmigrante, de 20 años y natural de la República de Mali, 
					está embarazada de cuatro meses y su estado de salud es 
					bueno. 
					 
					Por su parte, la Guardia Civil está llevando a cabo las 
					investigaciones necesarias para identificar al conductor del 
					vehículo.  
   |