| 
                     Nos acercamos al día de reflexión. 
					Será la hora de que callen los vehículos con las propagandas 
					de los distintos partidos, y el personal se prepare para al 
					día siguiente ir a depositar su voto personal e 
					intransferible.  
					 
					Y eso si, hay que ir a votar, más que una obligación es un 
					deber que tenemos todos los españoles de depositar nuestros 
					votos para elegir, con los mismos, a aquellas personas o a 
					aquel partido que se acerque más a nuestra ideología. Lo que 
					no se puede hacer, de ninguna de las maneras, es dejar de 
					cumplir con esa obligación y ese deber que tenemos todos los 
					españoles, mayores de edad, de ir a votar. 
					 
					Esos votos son imprescindibles para decidir quienes nos 
					deben gobernar según nuestro saber y entender, qué forma de 
					gobierno queremos par nuestra Ciudad a para nuestra 
					Autonomía. 
					 
					Algunos pensarán, según sus ideas políticas que deben seguir 
					gobernando quienes están gobernando porque lo están haciendo 
					bien y otros pensarán, sin duda alguna, que se debe cambiar 
					el gobierno por no estar de acuerdo como se gobierna su 
					Ciudad o su Autonomía. 
					 
					Sea cual sea su decisión de que continúen los que están 
					gobernando o que se tiene que efectuar un cambiose gobierno, 
					sólo lo podemos decidir los votantes, por todo ello es de 
					vital importancia acudir a la urnas a depositar nuestro 
					votos. Y hay que hacerlo de forma masiva, para que no haya 
					duda alguna de quién o quiénes queremos que nos gobiernen. 
					 
					No vale aquello de decir, yo, no voy a votar o realizar un 
					voto nulo poniendo cualquier frase en la papeleta para 
					demostrar sus descontento. Si usted no emite su voto, no 
					podrá decir nada contra quién o quiénes nos gobiernen, por 
					la sencilla razón de que carece usted de toda posibilidad de 
					criticar a ese gobierno, puesto que no ha emitido su voto 
					que de emitirlo, podría haber cambiado el gobierno que usted 
					no quería que le gobernara. 
					 
					En cuanto a ir a votar y poner en la papeletea alguna frase 
					o tachadura para que su voto sea nulo, no es más que una 
					perdida de tiempo el que usted ha realizado, hasta llegar al 
					colegio electoral para depositar un voto que no sirve par 
					nada. 
					 
					En todo caso, para evitar esa pérdida de tiempo, si a usted 
					no le gusta ninguno de los partidos que se presentan a estas 
					elecciones, vote en blanco que ese voto, al menos, tiene 
					valor alguno y no como el voto con frases y tachaduras. 
					 
					La realidad, la auténtica realidad, es que todos tenemos la 
					obligación y el deber de ir a votar para, de esa forma, 
					salgan o no salgan los que usted a voto, siempre nos quedará 
					el recurso de poder criticar la actuación del gobierno que 
					haya sido elegido de forma democrática en las urnas, en el 
					supuesto caso de que no haya sido elegido al que nosotros 
					hemos dado nuestro voto. 
					 
					A mi, personalmente y en persona, el asunto de la reflexión 
					me da exactamente igual, pues soy de los convencidos que 
					cada uno de nosotros, tenemos más que decidido a quien o a 
					quines le vamos a dar nuestro voto. 
					 
					Sí, se que algunos me pueden hablar de los indecisos, pero 
					no creo que sean tanto los mismos. No lo olviden, hay que ir 
					a votar. 
   |