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					Malika Al-Lal Haddu es, desde que el pasado 7 de abril se 
					constituyese la nueva Junta de Personal del Ingesa, la 
					presidenta de este órgano. Es consciente, sin embargo, de 
					que para “hablar cualquier asunto” como presidenta de la 
					Junta, necesita la conformidad de todos sus compañeros de 
					los diferentes sindicatos. Por ello, antes de la entrevista 
					con EL PUEBLO, Malika Al-Lal recuerda: “Que quede claro que 
					aquí hablo como delegada del sindicato CSI.F, no como 
					presidenta de la Junta”. Claro queda. La delegada denuncia 
					diferentes “deficiencias” del Hospital Universitario de 
					Ceuta, un centro en el que ella misma ejerció de directora 
					territorial, en 1996, cuando la sanidad ceutí funcionaba 
					como Insalud. 
					 
					Pregunta.- ¿Cómo valora la sanidad en Ceuta?  
					 
					Respuesta.- Como dice el dicho, todo en la vida es 
					mejorable. La sanidad en Ceuta tiene muchas deficiencias. Yo 
					hablo con toda la claridad del mundo: la administración 
					actual tiene una dejadez total, sobre todo en temas de 
					personal y de aparataje. Ya lo dijo el gerente, que los 
					equipos no eran de la categoría y de la alta resolución que 
					tenían que tener. Es algo que no entiendo, porque cuando tú 
					haces un concierto, el Ministerio de Sanidad suele pedir 
					unas características determinadas para poder comprar. Por 
					ejemplo, si es un aparato para hacer resonancia exigen que 
					sea de alta resolución y que tengan una determinadas 
					condiciones como pueden ser los teslas de los aparatos. El 
					de aquí es de alrededor de 0,5, cuando normalmente te exigen 
					que sea superior al 1,5. Por eso no entiendo como se hace un 
					concurso y se compra un aparato de esas características. 
					Habría que pedir responsabilidades a alguien, porque es 
					dinero tirado de todos los españoles”. 
					 
					P.- Pero el Hospital Universitario ha sido un gran 
					trabajo... 
					 
					R.- Este Hospital se hizo con el gobierno del Partido 
					Popular, que lo inauguraran los socialistas fue cuestión de 
					buena suerte. Cuando yo dejé la gerencia, el hospital se 
					dejó con el proyecto de construcción hecho y con la primera 
					piedra puesta. Lo difícil no es que empiece una obra sino 
					que te den el terreno y ponerlo en marcha. Esta es ya la 
					segunda legislatura del PSOE y propusieron hacer un cuarto 
					centro de salud por la zona de Benítez, y a fecha de hoy, no 
					sabemos si hay terreno y si ha empezado la obra. El reto es 
					hacer un hospital y unas Urgencias como hice yo, o crear el 
					061 y el centro de salud de la Mutua. Esas son las grandes 
					obras, y luego está que el trabajo funcione. A fecha de hoy, 
					lo único que han hecho es un consultorio en Benzú, en lugar 
					de haber aprovechado para hacer un gran centro de salud.  
					 
					P.- ¿El Hospital está ya cien por cien operativo? 
					 
					R.- Hay zonas que aún están cerradas. Además hay otros 
					aspectos, como que camas funcionantes hay 167, aunque la 
					Gerencia diga que hay 280 camas, o en el contrato de gestión 
					de 2010 aparezcan que hay 252 camas instaladas. Pero es todo 
					mentira. No te puedes inventar las cosas, y ellos se lo 
					inventan todo. El hospital tiene 180 camas, lo que pasa es 
					que el 30% de esas camas tenían que ser individuales, pero 
					las habitaciones se hicieron tan grandes que llegado el 
					momento en que hubiese una alta presión asistencial, esas 
					habitaciones individuales se podrían convertir en dobles.
					 
					 
					P.- ¿Por qué algunos aparatos del centro no son de alta 
					resolución? 
					 
					R.- Yo era directora territorial y el Hospital nuestro, el 
					de la Cruz Roja, no tenía máquina de resonancia, por lo que 
					teníamos que concertar las resonancias con Algeciras. Cuando 
					montaron una empresa de resonancia en Ceuta, los jefes del 
					Insalud me dijeron que si era un aparato de menos de 1,5 
					teslas, se prohibía que se concertara. Así que por el bien 
					de Ceuta se decidió hacer un concierto tal y como lo exige 
					la ley. No tiene sentido que cuando ya tenemos un Hospital 
					nuevo, que además están siempre diciendo que goza de las 
					mayores tecnologías, y después de que haya pasado más de un 
					año desde que se inaugurase, ahora digan cosas cómo que se 
					caen tornillos. El problema no es que los aparatos se hayan 
					comprado antes de que estuviese inaugurado el Hospital, 
					porque los conciertos se hicieron una vez terminado, ya que 
					va por partidas. En los diez mil millones de pesetas con los 
					que se presupuestó al inicio el Hospital, había una parte 
					para la dotación de material, una partida que no se daba 
					hasta que no estuviese el hospital. Lo que pasa es que 
					tenían prisa por inaugurarlo. Y ahora ocurre, que por 
					ejemplo, sale más caro tener que enviar a los pacientes a la 
					clínica privada de resonancia. Parece que aquí hayan 
					comprado los aparatos que hayan sobrado, como si hubieran 
					dicho ‘Buenos, vamos a mandarlos a Ceuta, que en Ceuta se 
					conforman’.  
					 
					P.- ¿Qué otros temas destacaría? 
					 
					R.- Un aspecto importante y que siempre reivindico es la 
					construcción de un helipuerto en la cubierta del Hospital. 
					Pero siempre me contestan que no es factible por los 
					vientos, pero es mentira; porque aquí cuando hay una 
					urgencia vuela Salvamento Marítimo, y ellos vuelan en las 
					condiciones más infrahumanas. Un helipuerto sería bueno para 
					el traslado de pacientes, pero también por el tema de los 
					transplantes. Si no lo ponen es por falta de dinero, el cual 
					no se consigue por la falta de dejadez de los de siempre. El 
					problema es de aquí, no de Madrid, porque ellos te dan; 
					cuánto tú menos pides, menos te dan porque menos gastas. 
					Mientras que si tú estás encima... 
					 
					P.- ¿Y qué ocurre con la creación del centro de diálisis? 
					 
					R.- Como mantener un centro de diálisis abierto 24 horas es 
					muy complicado, cuando se ideó el proyecto de obra para la 
					creación de un hospital, se incorporó crear un centro de 
					diálisis con doce camas en consultas externas y una máquina 
					en la UCI por si llegaba alguien por Urgencias. Pero esto no 
					se ha llevado a cabo porque han hecho un concierto fuera con 
					un centro concertado. Era un centro que no estaba y no se 
					sabe por qué se ha concertado cuando el objetivo era hace 
					era uno nuestro. Siempre que pregunto qué pasa, me dicen que 
					se va a abrir, pero a fecha de hoy no se ha hecho nada. 
					Además, tendrían que traer personal, que podían haber traído 
					al que ya estaba formado, pero tampoco se hizo.  
					 
					P.- Hablando de plantilla, ¿Cómo está ese tema? 
					 
					R.- El problema con el personal es que hay un montón de 
					plazas que aparecen, que se han creado, pero que no existe 
					una persona física que la cubra. Por ejemplo, a veces dicen 
					que han aumentado la plantilla cuando lo que han hecho es 
					cubrir plazas de gente que se ha ido. A veces puede ser que 
					haya aumentado algo de personal, pero no lo que dicen, y 
					mucho menos lo que se necesitan. 
					 
					P.- ¿Es eso lo que ocurre con el pacto de reubicación de 
					interinos? 
					 
					R.- Con la reubicación de interinos se dan dos problemas. 
					Han reubicado a todos, menos a la farmacéutica y a la 
					telefonista. En el primer caso, la farmacéutica llevaba doce 
					años y tenía una plaza como técnica de la función 
					administrativa, pero no se puede reubicar como farmacéutica 
					del hospital porque te piden la misma categoría, aunque 
					lleve tantos años en el puesto y haya hecho las funciones de 
					farmacéutica. Ella no tiene la especialidad que se necesita, 
					pero en lugar de reubicarla a ella, hacen lo propio con la 
					directora de gestión. Encima, en Atención primaria no hay 
					farmacéutico porque al que había se lo han llevado, por lo 
					que se podría reubicar ahí, ya que en esa área no necesitas 
					el ‘First’, que es el certificado específico, pero cuando 
					han sacado la nueva convocatoria, han colocado una coletilla 
					diciendo que necesita ese certificado. Le he dicho a la 
					Gerencia que están haciendo una ilegalidad, y me contesta 
					que sería bueno para apoyar al hospital. Cuando que mejor 
					aval que el que esta mujer haya estado trabajando en el 
					centro más de doce años, que haya montado la nutridosis, 
					llevado al nutricista, hecho guardias, cubierto a la otra 
					farmacéutica... Y ahora, sin embargo, está en el paro. Por 
					ello, y en este tema lo hemos hecho como Junta de Personal, 
					no como delegada del CSI.F, hemos instado a la Gerencia 
					entre todos los sindicatos a que saque la convocatoria y le 
					quite la coletilla.  
					 
					P.- ¿Y con la plaza de telefonista qué ha pasado? 
					 
					R.- La ministra de Sanidad se comprometió a que se cumpliera 
					este pacto de reubicación, al igual que se ha hecho en 
					Melilla, pero a las telefonistas, sin embargo, lo único que 
					se les hace son contratos eventuales, no crean la plaza. De 
					hecho, si los telefonistas están tan desbordados es porque 
					desde que las Consultas Externas están dentro del Hospital, 
					los telefonistas tienen el doble trabajo.  
					 
					P.- ¿Cómo está la plantilla en el resto de plazas? 
					 
					 
					R.- En otorrino hay cuatro plazas pero realmente están 
					cubiertas dos; en Endocrino hay una y no han creado la otra 
					plaza; en intensivos hay siete, pero en verdad están 
					cubiertas cinco; en anestesia hay siete cuando hay sólo seis 
					plazas cubiertas, y después esa séptima la cubre una médica 
					de Urgencias que sube a hacer refuerzo, pero claro, ella es 
					de Urgencias por lo que no existe una por urgencia y otra 
					por anestesia; es otra plaza menos. Luego, por ejemplo, en 
					aparato digestivo había dos y ahora hay dicen que ha 
					aumentado a tres, pero es mentira porque ya había antes 
					tres. 
					 
					P.- Entonces, ¿no son reales todas las plazas? 
					 
					R.- No, porque por ejemplo, cuando nombras a un jefe de 
					alguno de los servicios, la plaza que deja esa persona que 
					asume el rol de jefe debe ocuparla otro médico, pero lo que 
					hacen es que la misma persona ejerce de jefe y aparece como 
					que también está en su plaza anterior. Como si hubiese una 
					plaza más, pero no existe. Por ejemplo, en Obstetricia, 
					ponen que hay siete plazas y que crean una para el jefe, por 
					lo que serían ocho, pero en realidad siguen siendo siete 
					porque es uno de ellos, sin que se cubra la suya, el que se 
					convierte en jefe.  
					 
					P.- ¿Y qué le contesta la Gerencia cuándo pregunta por 
					qué no se crean esas plazas? 
					 
					R.- La respuesta es siempre que no hay presupuesto. Pero 
					entonces es cuando yo le digo que hay dos plazas creadas, 
					una para el gerente (Juan Carlos Querol) y otra para el 
					director territorial (Jesús Lopera), que se crearon previa 
					resolución para que se la dieran en propiedad. Ellos son 
					médicos generales jerárquizados, que eran de Cruz Roja y se 
					integraron en el Insalud como médicos de Urgencia. Se sacan 
					sus títulos de incentivistas por méritos, y la directora del 
					Ingesa, Sara Pupato, por resolución, les da la plaza a los 
					dos de intensivos sin ningún tipo de igualdad, méritos y 
					capacidad, sin cumplir uno de los requisitos. Había seis 
					plazas de intensivos, crean una sexta, la cubre Querol y 
					antes de hacer la resolución crean la séptima. Es decir 
					tienen dos plazas creadas para ellos pero que no están 
					cubiertas porque ellos están ejerciendo el cargo. No es 
					integración porque no están en la misma categoría, sino que 
					son dos plazas que se dieron por la cara. 
					 
					P.- ¿Cómo fueron sus inicios sindicalistas? 
					 
					R.- Todo empezó con problemas en el hospital. Los médicos 
					estábamos hartos, la directora era una déspota, el gerente 
					era Lopera... Así que decidimos montar un sindicato médico. 
					Yo no tenia ni idea de sindicatos, pero hablé con el 
					coordinador de CSI.F y me propuso llevar la sanidad desde 
					este. Lo primero que montamos fue una huelga porque 
					estábamos horrorosamente mal. Un año después tuve que 
					renunciar al cargo por ser nombrada directora del hospital. 
					Y luego me cesaron del cargo.  
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