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Los menores de ‘Punta Blanca’ y ‘La Esperanza’ afectados por
la intoxicación alimentaria son ya 99; de estos, 16 son del
primer centro, y 83 del segundo, según informó la Ciudad. El
consejero de Sanidad y Consumo, Abdelhakim Abdeselam, visitó
el viernes los centros, y ayer lo hizo la consejera de
Juventud, Deportes y Menores, Susana Román. Aunque el
viernes, los jóvenes presentaban un cuadro más leve, este
derivó en otra sintomatología que incluye diarrea y vómitos.
Las causas aún están por determinar.
El número de menores afectados por la intoxicación
alimentaria registrada en los centros de ‘La Esperanza’ y
‘Punta Blanca’ se elevaron ayer a 99, según informó el
Gobierno de la Ciudad. De estos 99 menores, 83 son de ‘La
Esperanza’, un centro que acoge a un total de 107 menores;
mientras que 16 pertenecen a ‘Punta Blanca’, centro que
alberga a 26 personas.
El viernes, un total de 39 menores fueron atendidos en el
Hospital Universitario. Para ello, el servicio de Medicina
Preventiva, con Julián Domínguez a la cabeza, en
colaboración con el Servicio de Urgencias del centro de Loma
Colmenar, activaron un protocolo de actuación para
atenderlos. En base a este, se aisló una parte de la sala de
Observación y se destinó personal específico. Al mismo
tiempo, un equipo formado por un médico y una enfermera se
desplazó hasta ‘La Esperanza’, y se intensificó el trabajo
del SUAP, según informaron fuentes del Ingesa (Instituto
Nacional de Gestión Sanitaria).
Cuatro de los niños atendidos tuvieron que quedarse en
observación durante la mañana de ayer, aunque por la tarde
se les dio el alta. Por su parte, otros cuatro que ya
estaban dados de alta tuvieron que ser atendidos ayer en
Urgencias, de los cuales dos pudieron marcharse al centro,
mientras otros dos continuaban ingresados a las diez de la
noche, aunque desde el Ingesa informaron de que,
previsiblemente, se les daría el alta y podrían dormir en el
centro.
La Ciudad informó que si bien los jóvenes presentaban en las
primeras horas del viernes un cuadro más leve, éste derivó
“en otra sintomatología que incluye diarrea y vómitos”. “No
obstante, los menores van evolucionando favorablemente a
medida que pasan las horas, en lo que supone un estado de
remisión de la gastroenteritis provocada por la comida
servida por la empresa adjudicataria del concurso público
convocado para contratar este servicio”, explicaron mediante
un comunicado de prensa.
El Gobierno agregó que todos los jóvenes se alimentan a base
de una dieta blanda y que están en tratamiento para evitar
que haya más afectados, siendo atendidos por el personal
sanitario del Ingesa, en el caso de ‘La Esperanza’, y por el
médico de la Ciudad, en el de ‘Punta Blanca’.
Tanto por parte del consejero de Sanidad y Consumo,
Abdelhakim Abdeselam, como por parte del Ingesa, confirmaron
que las muestras de los alimentos, así como de las heces de
los niños han sido enviados a laboratorio, pero que
“probablemente hasta el lunes” no se conocerán los
resultados. El consejero agregó que no era “bajo ningún
concepto” algo grave y explicó que había visitado el viernes
los centros, al igual que ayer lo hizo la consejera de
Juventud, Deportes y Menores, Susana Román, la cual aseguró
que en ‘Punta Blanca’ quedaban siete niños enfermos, y
algunos más -cuyo dato no pudo concretar- en ‘La Esperanza’.
Triple vertiente
La causa de la intoxicación se conocerá una vez que se
obtengan los resultados de las muestras, que tienen una
triple vertiente, según informó la Ciudad: “Alimentos,
manipuladores de alimentos y enfermos”. Para las dos últimas
se utilizan muestras nasofaríngeas, mientras que para la
primera se emplean los denominados testigos, es decir, la
muestra que en cada servicio de comida se guarda de los
platos que son servidos, precisamente por si se registra un
caso de esta naturaleza. Los análisis están en manos del
laboratorio de la Consejería de Sanidad y Consumo, cuyo
personal continúa trabajando en el caso.
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El ‘Sarao’ asegura que ha pasado todos los controles de
Sanidad
Mientras que el Gobierno de la
Ciudad no quiso confirmar cuál era la empresa de catering de
los colegios afectados, al no considerar “relevante” el
dato, fue la propia empresa ‘Sarao Jardines’ la que informó
de que ellos son los encargados de este servicio y de que,
“de manera consecuente”, si había sido error suyo, lo
asumirían, pero que de momento era necesario esperar los
resultados de los análisis que confirmen el motivo y el foco
de la intoxicación. En ese sentido, Luis Márquez,
propietario del ‘Sarao’, explicó que en la mañana de ayer,
personal de Sanidad se personó en el local (una actuación
que tampoco la Ciudad ha querido ni confirmar ni desmentir)
e hicieron “un exhaustivo control para comprobar que todo
estaba en perfectas condiciones”, por los cual se les ha
permitido “seguir trabajando con normalidad”.
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SANIDAD
