OPINIÓN - LUNES, 4 DE JULIO DE 2011

Un problema que se enquista

El de los vertidos ilegales es un problema que parece enquistarse en la ciudad. Al fenómeno del desguace y abandono de vehículos en la vía pública, con el consiguiente derrame de productos tóxicos, se suma el almacenamiento de escombros y residuos en vaguadas y terraplenes, tanto en espacios urbanos como en los montes. El problema es más sangrantes en algunas barriadas, sobre todo, en las limítrofes con la frontera del Tarajal, que parece el principal origen de esta situación. La compraventa de piezas, chatarra y otros enseres usados, junto con la basura, en forma de envoltorios, que genera el tránsito de porteadores y de mercancías transportadas en los más insólitos huecos de los coches, ha convertido algunas zonas de Ceuta en basureros difíciles de erradicar.
 

Un Campus moderno pero con solera

Ceuta disfrutará a partir del curso 2012-2013, si todo marcha según lo previsto, de un Campus moderno pero con la “solera” que le dará el hecho de esta ubicado en un edificio cuya construcción comenzó en el siglo XVIII. El cuartel del Teniente Ruiz se ha salvado gracias a este proyecto del destino que han tenido otros inmuebles e instalaciones militares, la demolición o la ruina, y quedará preservado como parte del patrimonio histórico de la ciudad. Además, los casi 22.000 metros cuadrados de superficie construida, entre el acuartelamiento y el anexo de nueva planta, permitirán -así ha de ser, y eso dependerá ahora de las universidades- la implantación de nuevos títulos que no sólo sirvan a los ceutíes, sino que sean también un foco de atracción de estudiantes de fuera.