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Las diferentes atenciones y programas que la VICARÍA GENERAL
DE CEUTA, el SECRETARIADO DIOCESANO DE MIGRACIONES y otras
Instituciones y Entidades de la Iglesia coordinan y realizan
en la actualidad al servicio de los inmigrantes que hay en
la Ciudad Autónoma de Ceuta, tiene sus antecedentes en el
comienzo de la década de los 90, cuando en los años 1990,
1991 y 1992 se atendía en la Parroquia de Nuestra Señora del
Valle a los primeros inmigrantes que llegaban a esta ciudad.
Posteriormente, en el año 1993, un grupo de inmigrantes
subsaharianos se instaló en las murallas del Ángulo. En
aquella época fue ejemplar la actitud del Padre José Béjar
Sánchez, párroco de Santa María de África, por su decidido
compromiso con aquellos inmigrantes y por la coordinación
que logró de las diversas ayudas y socorros de distintas
Instituciones y entidades ceutíes.
En este sentido, la Parroquia de Santa María de África
siempre ha sido y sigue siendo en Ceuta un referente de
atención y servicio humano y pastoral a los inmigrantes.
Desde la época del Padre Béjar se mantiene todos los
Domingos una celebración religiosa a la que acuden los
inmigrantes y en la que las lecturas y cantos se suelen
realizar en varios idiomas.
Al final del año 1995, los inmigrantes se instalan en el
conocido como “Campamento de Calamocarro”, que comenzó con
una situación muy denigrante y que en el año 1999 llegó a
alcanzar la cifra de 2.000 inmigrantes. Durante este tiempo,
un equipo de voluntarios de la Iglesia acude a prestar ayuda
a los inmigrantes. En esta época se organizan en
colaboración con la Administración del Gobierno y con el
Secretariado de Migraciones grupos de acogida en
instituciones eclesiales de la Península y desde la Iglesia
de Ceuta se impulsa la creación de la organización Ceuta
Acoge.
En el año 1999 llega a Ceuta la Comunidad de Carmelitas de
Vedruna para atender a los menores inmigrantes no
acompañados.
En el año 2000 se cierra el Campamento de Calamocarro y se
inaugura por parte del Gobierno el Centro de Estancia
Temporal de Inmigrantes – CETI -, lo que supone un cambio
sustancial muy positivo en los servicios de acogida y
atención que se prestan al conjunto de los inmigrantes que
llegan a Ceuta. Quizás haya que reseñar como aspecto
negativo la larga estancia que han sufrido algunos
inmigrantes que han superado los tres años, con la secuela
de algunas situaciones de tensión en la convivencia de los
propios residentes y otros problemas de depresión y
abatimiento por estos tiempos tan prolongados.
Desde el año 2001 hasta el 2005, se abre una importante vía
de colaboración del Secretariado de Migraciones de la
Diócesis de Cádiz y Ceuta con la Delegación del Gobierno de
Ceuta en PROGRAMAS ESPECIALES DE ACOGIDA de inmigrantes en
la Península con la finalidad de favorecer la integración
social, mediante las siguientes condiciones: acogida y
formación socio-laboral durante varios meses en los pisos de
acogida de la Asociación CARDIJN en Cádiz y concesión de la
autorización excepcional de residencia y trabajo por parte
de la Delegación del Gobierno. Con este programa piloto se
logró la integración social y laboral de más de un centenar
de inmigrantes, resultando una experiencia extraordinaria y
ejemplar que lamentablemente no ha tenido una continuidad
posterior.
Hay que destacar un hecho importante sucedido en el año
2003. En dicho año se sobrepasa la capacidad de acogida del
CETI y queda un grupo de inmigrantes en la ciudad sin poder
ser acogidos. Ante las torrenciales lluvias en octubre de
2003, se pide ayuda a la Iglesia para una acogida
provisional de unos días de 80 inmigrantes, que se realiza
en el antiguo Colegio de San Antonio. La provisionalidad
duró 2 años, de octubre de 2003 a julio 2005 y el número de
inmigrantes acogidos en el Colegio pasó de 80 a 260. Los
Hermanos de la Cruz Blanca tuvieron que realizar hasta
cuatro turnos diarios de reparto de comida y una ampliación
del comedor.
A lo largo de estos años hay que destacar las actuaciones de
distintas entidades e instituciones de la Iglesia Católica:
FRANCISCANOS DE LA CRUZ BLANCA.- Aunque actualmente no
tienen una actuación directa, durante muchos años, su
trabajo con los inmigrantes ha sido encomiable, sobre todo
con el comedor social ubicado en la Barriada del Sardinero y
con acogidas de emergencia.
COMUNIDAD DE CARMELITAS DE VEDRUNA.- Inicialmente su trabajo
estuvo centrado en los menores inmigrantes no acompañados,
pasando después a realizar distintos programas con el
conjunto de los inmigrantes: primeras acogidas,
acompañamiento y asesoramiento, clases de español y otros
talleres, así como algunas actividades religiosas y
pastorales.
COMUNIDAD DE RELIGIOSAS ADORATRICES.- Su trabajo se centra
en la atención a mujeres - algunas con niños -, normalmente
derivadas por los Servicios Sociales de la Ciudad con
problemas en su hogar. Usualmente son de religión musulmana.
CARITAS DIOCESANA.- El actual equipo de Cáritas Diocesana
tiene entre sus proyectos trabajar más directamente con el
colectivo de inmigrantes.
CARITAS DE SAN JOSÉ.- La parroquia de San José viene
realizando todos los años un curso de alfabetización para
mujeres musulmanas. La asistencia normalmente se da entre
las mujeres que trabajan en el servicio domestico de la zona
donde se ubica la Iglesia.
PARROQUIA SANTA MARIA DE ÁFRICA.- Acompañamiento y ayuda
inicial al inmigrante - calzado, ropa, comida, otras ayudas
-. A nivel pastoral, hay que destacar la acogida y atención
personal, así como es un referente en la ciudad la
celebración de la Eucaristía de los domingos, a la que acude
un amplio grupo de inmigrantes. Hay un proceso catecumenal
para aquellos que lo solicitan. De otra parte, es la Iglesia
que se responsabiliza de celebrar las exequias en el
cementerio de aquellos que pierden la vida en el mar o en
otras circunstancias.
CENTRO DE ATENCION Y ACOGIDA DE INMIGRANTES SAN ANTONIO.- En
el año 2006, la Secretaría de Estado de Inmigración y
Emigración concede a la Asociación CARDIJN una subvención
para adecuar las instalaciones del antiguo Colegio de San
Antonio, que pasa a ser CENTRO DE ATENCION DE INMIGRANTES DE
SAN ANTONIO. Es un Centro dependiente del Secretariado de
Migraciones y de la Vicaría General, que gestiona la
Asociación Cardijn.
Hay dos Programas subvencionados por el Ministerio de
Trabajo e Inmigración para el mantenimiento del Centro y
para la realización de acciones educativas. Entre las
actividades que se desarrollan hay que destacar: Información
general y primera acogida, acogidas de emergencia a
colectivos vulnerables, acompañamiento individual y
familiar, asesoramiento y orientación, cursos y talleres
para promover la formación y la integración y campañas de
sensibilización.
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OPINIÓN
/
COLABORACION
