| 
                     Es otro de los problemas, por si 
					había pocos, que se le vienen encima a Ceuta, desde ahora. 
					 
					La inmigración clandestina, desde hace ya bastantes años, 
					está siendo un grave problema que se va acrecentando, día a 
					día, y que, en estos instantes, no sé si tiene alguna 
					solución viable, pero yo no soy capaz de poderla ver. 
					 
					Los inmigrantes clandestinos llegan por todos los medios 
					ilegales que puedan existir y con aquello de que hay que ser 
					piadosos y acogedores, hemos pasado de tener, en Ceuta, unas 
					cuantas docenas, a estar rondando los 800, algo que dudo 
					mucho que la Ciudad y otros organismos de Ceuta sean capaces 
					de poder hacer frente. 
					 
					En un principio, se planteó el problema de que estaban sin 
					control alguno, en las dependencias del ángulo. 
					 
					Más tarde se habilitó el CETI y parecía que su capacidad, 
					para unos 500 sería insalvable, de por vida. Se llegó a los 
					100, a los 200 ..., y así hasta que por el mes de mayo se 
					daba la voz de alarma de que con 550 se había rebasado la 
					capacidad de este centro. 
					 
					Ahora eso ya parece un juego de niños, por cuanto el pasado 
					lunes ya había 725 subsaharianos, una cifra que rompe todas 
					las previsiones y pone el futuro muy complicado. 
					 
					¿Qué se puede hacer, a partir de ahora?. Cualquier cosa que 
					se haga será poco positiva. Si dejas sin acoger a media 
					docena, al instante habría docenas de “bocazas” hablando de 
					falta de sensibilidad para los desamparados. Mal. 
					 
					Ampliar el CETI sería estar, desde los propios organismos de 
					Ceuta, haciendo una nueva “operación llamada”, para que 
					vinieran muchos más. Peor. 
					 
					No veo más solución que forzar a los países que dejan salir 
					a estas gentes a que se hagan cargo de ellos y que sean 
					ellos los que corran con estos inmensos gastos que está 
					teniendo Ceuta y que por atender a los de fuera dejará sin 
					poder atender parte de las necesidades de los de casa. 
					 
					No lo debemos ver de otra manera, esto está siendo una nueva 
					invasión de África hacia Europa, escapando del hambre o de 
					otras cosas de sus países, mientras que los rectores de esos 
					países hambrientos sacan del propio país la mayor parte de 
					las riquezas hacia lugares seguros. 
					 
					Y a nosotros nos mandan la población para que sea mantenida 
					aquí y no cree problemas en su propio país. 
					 
					Ahora mismo, pues, el CETI se ha quedado chico ya y como 
					esto parece el cuento de nunca acabar, cada día más, llegan 
					inmigrantes de todas las formas posibles y por todos los 
					medios. 
					 
					Tanto la Guardia Civil como Salvamento Marítimo, con la 
					Salvamar Gadir, no paran de recoger inmigrantes que “a la 
					deriva” se acercan o están llegando a nuestros dominios. 
					 
					Algo habrá que hacer, pero algo para quitar este peso que le 
					está cayendo a Ceuta. Y la base de tantas llegadas a nuestra 
					ciudad está en esa llamada a los otros de su propia tierra, 
					en estos o parecidos términos:” Aquí nos acogen, nos dan de 
					comer, tenemos un techo y luego ..., ya veremos hacia donde 
					nos llevan o a donde nos dejan ir”. 
					 
					El buen trato es el reclamo para docenas y docenas cada mes. 
					Soluciones perfectas no hay, pero algo tendrán que hacer 
					para poder frenar esta invasión. Eso está claro. 
   |