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					Las últimas sesiones del equipo caballa están siendo 
					marcadas por correcciones estratégicas y tácticas que en 
					todo momento hace el técnico aragonés Sergio Lobera. El 
					míster del conjunto ceutí quiere guardarse las espaldas y no 
					quiere sorpresas de cara al partido de mañana en el Nuevo 
					Carranza a partir de las diez de la noche contra uno de los 
					gallitos de la categoría, como es el Cádiz. Por este motivo, 
					junto al entreno de ayer viernes y al del pasado jueves, se 
					hizo hincapié en las labores estratégicas y a la vez se iban 
					intentando corregir errores tácticos que pudieran ser 
					perjudiciales en acciones reales de juego. 
					 
					La sesión matinal de ayer no tuvo una excesiva carga física 
					para los jugadores caballas puesto que ya acusan una semana 
					larga de entrenamientos, ya que sólo contaron con el día de 
					descanso del pasado martes. Por lo que, el entreno no iba 
					encaminado a cargar las piernas de los futbolistas. En la 
					primera parte de la sesión, se hizo un trabajo técnico de 
					ejercicios, donde se combinaba estiramientos de cuadriceps, 
					abdominales e isquiotibiales. Además, también se hicieron 
					pruebas de equilibrio con la pierna derecha e izquierda. 
					Todo ello, marcado en un circuito guiado por postas, en la 
					que los jugadores se cambiaban por tiempo sin estirar en 
					ningún momento. Posteriormente, pasaron al interior del 
					terreno de juego ya que los ejercicios anteriores se 
					realizaron en el anexo al campo de juego. En segundo lugar, 
					una vez dentro del campo combinaron ejercicios de velocidad 
					de reacción, con otros de toque de balón en grupos de siete 
					futbolistas. En este último, lo que se pretendía en todo 
					instante es que circulará la pelota lo más rápido posible 
					para así desconcertar al contringante, y crear acciones de 
					peligro de cara a portería. 
					 
					En tercera instancia, se realizaron llegadas a portería con 
					finalización en contragolpes montados con superioridad 
					númerica entre defensores y atacantes. En algunas ocasiones, 
					se enfrentaban dos defensas contra tres delanteros, y en 
					otros momentos se veían las caras un sólo defensor contra 
					dos atacantes. Todo ello con remate a portería. De cara a 
					puerta el conjunto caballa se mostró muy contundente y 
					materializó bastantes goles. 
					 
					Por último, al final de la sesión, con especial atención del 
					míster Lobera, se hizo un partidillo a campo entero, donde 
					se pudo ver cómo el equipo quiere trabajar la presión contra 
					el Cádiz y también cuál va a ser la estrategia que a priori 
					ponga sobre la hierba el técnico aragonés del Ceuta. Se 
					espera el 4-3-3 que ganó al Sevilla Atlético con un trivote 
					en el medio del campo, con tres atacantes, dos de ellos 
					abiertos a banda, como son Añete y Guzmán Casaseca, y un 
					atacante como Fernando en punta, que puede crear mucho 
					peligro a los amarillos. 
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					Se unen los tocados del jueves al entrenamiento de sus 
					compañeros 
					Los tres futbolistas que no se 
					ejercitaron el pasado jueves por precaución, estre los que 
					se encontraban Germán y Andrés, en el entrenamiento de ayer 
					en el Primero de Mayo de San Juan completaron la sesión con 
					sus compañeros. El principal consejo que le dio el cuerpo 
					técnico a estos futbolistas fue el de no forzar durante 
					dicho entrenamiento ya que podían acusar molestias más 
					largas de cara al futuro. Por lo que por ese motivo 
					prefirieron reservas fuerzas de cara al importante y 
					complicado partido que tienen mañana el domingo en tierras 
					gaditanas. 
					 
					Por tanto, el míster del conjunto ceutí nuevamente tiene a 
					toda la plantilla a su disposición, al igual que la semana 
					pasada en el debut liguero, para afrontar con creces el 
					segundo envite de liga. 
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