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					Cambiar la situación de prohibición de pasar a Melilla 
					productos cárnicos y lácteos procedentes de Marruecos no 
					será fácil porque depende de una normativa nacional y 
					europea que “no parece que vaya a ser cambiable”. Con estas 
					palabras, el delegado del Gobierno en Melilla, Antonio María 
					Claret, valoró cómo se encuentra la situación fronteriza en 
					cuanto a la importación de carne del país vecino, sobre la 
					que recordó que está prohibida desde 1993. Además, insistió 
					en que actualmente se está actuando de la misma forma que en 
					los últimos 18 años, sin que se haya modificado nada ahora 
					ni en las próximas fiestas religiosas. 
					La prohibición de pasar productos cárnicos y lácteos por la 
					frontera no es nueva, sino que se lleva aplicando desde 1993 
					como consecuencia de una normativa española y europea 
					relativa a la sanidad animal y humana. Así lo recordó ayer 
					el delegado del Gobierno en Melilla, Antonio María Claret, 
					quien apuntó precisamente a esas normas como la causa que no 
					facilita un cambio a favor de la importación de esos 
					alimentos hacia nuestra ciudad, como piden organizaciones 
					como la Comisión Islámica (CIM) y Coalición por Melilla (CPM). 
					 
					Preguntado sobre si habría posibilidad de dar un giro a la 
					actual situación para que se permita el paso de carnes y 
					lácteos hacia Melilla, Claret respondió que no le parece 
					“fácil” porque “habría que modificar las normas, hay normas 
					europeas que nos afectan y no parece que eso vaya a ser 
					cambiable”. 
					 
					En cualquier caso, quiso puntualizar que el panorama actual 
					no es producto de ningún problema, sino de una prohibición 
					vigente desde hace casi 20 años, durante los cuales la 
					Delegación del Gobierno y las Fuerzas de Seguridad del 
					Estado “no han cambiado nada”. “Lo que sí debe saber todo el 
					mundo es que no se ha modificado nada, que se está haciendo 
					igual y que en las fiestas religiosas que vengan se hará 
					también de la misma manera”, destacó Claret, alegando 
					posiblemente a la próxima Pascua del Sacrificio, en la que 
					se permite de manera excepcional el paso de borregos desde 
					el país vecino. 
					 
					El delegado aseguró que en la frontera “se están haciendo 
					los mismos controles que se hacían antes”, por lo que “no 
					hemos cambiado ni intensificado nada”. “No veo motivo para 
					que alguien pueda asombrarse de que eso está sucediendo 
					así”, continuó Claret, que confirmó que la CIM ya cuenta con 
					autorización para llevar a cabo hoy una manifestación desde 
					la Mezquita Central hasta la sede de la Delegación del 
					Gobierno a partir de las 18,00 horas. 
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