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El Gobierno melillense, a través de su presidente, Juan José
Imbroda, criticó durante el transcurso de la jornada de ayer
martes que “se castigue” a las regiones que cumplen sus
objetivos en materia financiera y ha censurado que en los
próximos presupuestos se vaya a penalizar a autonomías que
han mantenido un déficit por debajo del 0,75 por ciento,
como es el caso de Melilla
El Gobierno melillense ha criticado hoy que “se castigue” a
las regiones que cumplen sus objetivos en materia financiera
y ha censurado que en los próximos presupuestos se vaya a
penalizar a autonomías que han mantenido un déficit por
debajo del 0,75 por ciento, como es el caso de Melilla.
En declaraciones a los periodistas, el presidente
melillense, Juan José Imbroda (PP), ha adelantado hoy que en
los próximos Presupuestos de la Ciudad Autónoma se van a
tener que realizar ajustes, sobre todo derivados del
descenso de las partidas que el Estado va a dedicar a la
ciudad.
Aunque no ha querido dar datos, sí ha mostrado que tenía en
su mano un avance de los presupuesto del año que viene, en
los que se va a trabajar, recomponiendo distintas partidas.
Imbroda ha expresado su deseo de que, tras las elecciones
del 20 de noviembre, la situación mejore, y ha dicho esperar
“como agua de mayo” que Rajoy sea el nuevo presidente del
Gobierno de España.
Ha confiado en que Rajoy sea capaz de “dar la vuelta” a la
situación, algo que repercutirá en el bien de Melilla,
ciudad que necesita “una alternativa económica”, sobre todo
tras el importante incremento poblacional que se ha
producido en los últimos años hasta los 80.500 habitantes.
En opinión de Imbroda, se está perdiendo “un tiempo
precioso”, ya que Zapatero tendría que haber disuelto las
Cortes y haber convocado elecciones en el mismo momento que
anunció su marcha. “Zapatero es ahora un presidente
interino”, ha subrayado el mandatario autonómico
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