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Los robos en las playas melillenses han sido objeto de
numerosas quejas este verano, razón por la que la Consejería
de Seguridad Ciudadana se ha comprometido a analizar
“fórmulas” para que el próximo año no haya tantas
incidencias de este tipo o, por lo menos, ponérselo más
difícil a los amigos de lo ajeno. El responsable del área,
Francisco Javier Calderón, avanzó ayer en una entrevista
concedida a la Cadena Cope que la Ciudad Autónoma está
buscando posibles soluciones para este problema. Una de
ellas podría ser la instalación de cofres de seguridad junto
a las sombrillas, de modo que los bañistas tengan una opción
más cercana que las consignas para dejar sus pertenencias
bajo llave mientras disfrutan del ocio y el relax en la
playa. La Consejería de Medio Ambiente se está planteando
esta posibilidad, aunque Calderón apuntó que si es necesario
aumentar la coordinación entre los cuerpos de seguridad para
que las playas sean más seguras se hará, ya que algunas
zonas de la costa es competencia de la Guardia Civil y otras
de la Policía Local. “El espíritu de la Delegación del
Gobierno y la Ciudad Autónoma es de colaborar todos porque
estamos para lo mismo, que es ayudar y servir a los
ciudadanos”, subrayó el consejero.
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