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El pasado viernes, un grupo de personas, concentradas para
quejarse por no estar en la lista de los planes de empleo,
cargó contra dos autobuses de la COA, de la línea 5, que
pasa por Cabrerizas, y de la línea 6, la que va a Mariguari.
De éste último, rompieron cuatro cristales tras una “lluvia
de piedras” a las 16:45 horas, momento en el que decidió
suspenderse la línea durante el fin de semana, hasta el
lunes. Se presentó una demanda y el presidente de la COA,
José Fuentes, pide que se instalan cámaras de vigilancia “de
forma permanente” en la carretera de los Pinares, por
ejemplo, para identificar a quienes provocan, con cierta
frecuencia, actos vandálicos, pues “un día va a pasar algo
gordo”.
Los hechos ocurrieron el viernes a las 16:45 horas
“subiendo” por la carretera de la Vía Láctea, pasada la
Cañada, cuando un autobús de la línea 6 de la COA, que va
hasta el puesto fronterizo de Mariguari, empezó a recibir
una “lluvia de piedras”, definió el presidente de la COA,
José Fuentes. Los pasajeros tuvieron que echarse al suelo
del vehículo, ninguno sufrió daños, ni el conductor tampoco,
pero sí el autobús, al que le rompieron dos cristales de una
parte y otros tres de la otra, además de bollos en la chapa,
porque “no eran piedrecillas”, aseguró Fuentes.
Por otra parte, un autobús de la línea 5, que comunica con
Cabrerizas, empezó a sufrir la misma suerte alrededor de las
18 horas, cuando pasaba por el barrio, aunque no con rotura
de cristales, como el anterior. De éste, decidió suspenderse
la línea alrededor de las 21 horas, aunque ayer se recuperó
el servicio. No, así, de la línea 6, cuyo servicio queda
interrumpido hasta mañana, para prevenir, pues se anunciaban
nuevas movilizaciones y “no nos fiamos”.
El mismo viernes, pusieron una denuncia por estos hechos
“para que haya constancia”, dijo el presidente de la COA,
sin fe a que esto vaya más allá, sino a que se quede
“archivado” entre otras muchas denuncias, dijo, porque “es
muy difícil que los cojan”. Fueron varias personas las que
protagonizaron estos actos vandálicos, muchos de ellos
menores de edad, aseguró Fuentes, como suele ocurrir en las
protestas de este tipo, “la mayoría eran jóvenes”,
apostilló.
Fuentes lamenta que la COA tenga que sufrir actuaciones de
este tipo “cada vez que se levanta un altercado”, ya sea por
los planes de empleo o por cualquier otro motivo, pues cree
que no hacen falta grandes excusas para que se produzcan
incidentes de este tipo. Es por ello que cree necesario
instalar en zonas como la carretera que va hacia los Pinares
cámaras de vigilancia, “de forma permanente”, para en
situaciones así “ver quienes son”, pues “un día va a pasar
algo gordo”.
José Fuentes desea que “se acabe esto” y que “se tomen las
medidas oportunas”, que “se busquen soluciones”, aunque
alabó la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad
cuando se producen incidentes de este tipo. Por suerte, el
viernes “no hubo heridos”, pero sí daños materiales para la
COA que ascienden a unos 800 euros, según el presidente.
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protesta
