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					Toda la familia del joven T.A., el menor de 15 años que 
					falleció el pasado domingo en Marbella, se reunió ayer para 
					enterrarle en Sidi-Embarek. Un momento en el que quisieron 
					dejar claro que el asesinato no se ha debido a un “ajuste de 
					cuentas”, como afirman se ha llegado a decir en los medios, 
					y que el chico era un buen estudiante y deportista. 
					 
					El barrio de Miramar Bajo se vistió ayer de luto para 
					enterrar al joven ceutí que falleció el pasado domingo en 
					Marbella. El menor, de 15 años, fue asesinado presuntamente 
					por el dueño de la finca en la que al parecer intentaba 
					colarse. No obstante, la investigación aún sigue bajo 
					secreto de sumario, según dijo la hermana de la víctima a 
					este medio. Toda la familia del menor viajó a Ceuta para 
					asistir al entierro, que tuvo lugar ayer sobre las 14.30 
					horas en el cementerio de Sidi-Embarek.  
					 
					Según recogía Efe, la Policía ha detenido a otros dos 
					implicados en el caso, la mujer del dueño de la finca, donde 
					al parecer se cultivaba marihuana, y un joven que acompañaba 
					al menor ceutí. Ambos han pasado a disposición del juzgado 
					de Instrucción de Marbella. La Policía ya ha hecho un 
					registro en el domicilio del presunto autor de los hechos, 
					donde encontraron once armas largas, entre ellas la escopeta 
					con la que causó la muerte al joven.  
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