| 
                     
					La II promoción de la ENME ya se encuentra en las aulas. 
					Ayer arrancaron las clases, que hoy inaugurarán de forma 
					oficial el director de la escuela, Arjan Sundardas, y el 
					consejero de Economía y Empleo, Premi Mirchandani. Los 29 
					alumnos de esta edición ya han descubierto que les esperan 
					“muchas noches en vela” que afrontan con ilusión. 
					 
					Acaban de empezar y ya son conscientes del alto nivel de 
					exigencia que impone la Escuela de Negocios del Mediterráneo 
					(ENME). Los nuevos alumnos de la II promoción aterrizaron el 
					fin de semana pasado en las aulas de la escuela y ayer 
					comenzaron de forma oficial las clases. Un nuevo periplo que 
					durará hasta la próxima primavera y que afrontan con 
					ilusión, sabiendo que les esperan “muchas noches en vela” 
					pero ante el que se sienten “muy motivados”. El ritmo es 
					frenético y bien lo sabe el director de la ENME, Arjan 
					Sundardas, que hoy dará la clase inaugural a la que también 
					asistirá el consejero de Economía y Empleo, Premi 
					Mirchandani, con motivo de la inauguración oficial del 
					segundo curso de la escuela.  
					 
					Pero si el nivel de exigencia es alto, el de expectativas 
					también. Y es que, los alumnos llegan dispuestos a trabajar 
					y a llevarse mucha experiencia. Entre los atractivos que 
					ofrece el ‘Advanced Management Program’ que imparte la ENME 
					está la posibilidad de “relacionarse con gente que ha 
					estudiado diferentes carreras”, “el intercambio de 
					experiencias”, o “descubrir distintos puntos de vista”, son 
					algunas de las opiniones de los 29 alumnos que este año 
					componen la promoción de la ENME. Pero a todo esto hay que 
					añadir el objetivo principal: continuar la formación.  
					 
					“En un mundo cambiante es importante seguir formándonos”, 
					apuntaba un alumno, mientras que otro aseguraba que este 
					programa servirá para “actualizarse”. Otros buscan 
					consolidar su curriculum en una escuela que ya comienza a 
					tener un buen nombre.  
   |