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					El secretario de Estado, Gaspar Zarrías, ha querido pasar 
					un día de campaña electoral junto con los candidatos al 
					Congreso y al Senado del Partido Socialista por Ceuta. 
					Zarrías, que atendió a EL PUEBLO en una entrevista realizada 
					en el Hotel Parador La Muralla, resaltó la importancia del 
					equipo formado por José Antonio Carracao y los suyos. 
					También tuvo duras palabras para el candidato a la 
					Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, del que afirmó que 
					sólo “leyó un papel” durante el debate. Zarrías propuso cómo 
					salir de la crisis económica: con el voto al Partido 
					Socialista, ya que, la “verdadera” encuesta, la de la 
					ciudadanía, será el próximo día 20 de noviembre en las urnas 
					españolas. 
					 
					Pregunta.- ¿Qué es lo que puede ofrecer a Ceuta el Partido 
					Socialista si gana las elecciones del próximo 20 de 
					noviembre? 
					 
					Respuesta.- Nada más y nada menos que continuar el esfuerzo 
					ímprobo que ha hecho el Gobierno socialista con la ciudad de 
					Ceuta. Ceuta para los socialistas es una prioridad. Un dato 
					absolutamente clarificador es el siguiente: Aznar gobernó 
					España durante ocho años y las inversiones en Ceuta 
					superaron con poco los 320 millones de euros. En la última 
					legislatura del gobierno socialista, con dos años -casi 
					tres- de crisis brutal, se han invertido más de 485 millones 
					de euros. Por lo tanto, ese trabajo, ese esfuerzo, esa 
					implicación para dar a Ceuta lo que se merece, es 
					posiblemente la mejor tarjeta de visita que hoy podemos 
					presentar los socialistas. Y es que esos 485 millones de 
					euros de esta legislatura -repito, con una crisis de 
					‘caballo’-, han significado un hospital, una depuradora, una 
					desaladora, viviendas, modernización, infraestructuras. En 
					definitiva, compromiso. Pero ese trabajo y continuidad no es 
					solamente aquí, ya que una de las pocas menciones locales en 
					el programa del Partido Socialista y que lidera Alfredo 
					Pérez Rubalcaba, es Ceuta. Es decir, su papel dentro del 
					contexto dentro de nuestro país y en la Unión Europea. No 
					venimos por tanto a prometer humo, sino a hablar del futuro, 
					con un soporte y unos cimientos importantes que no son otros 
					que nuestra gestión en estos últimos ocho años.  
					 
					P.- ¿Cómo definiría a los tres candidatos del partido por 
					Ceuta, Ruiz, Daoud y Melgar? 
					 
					R.- Conozco a los tres. Son gente que quiere a su pueblo y 
					sabe lo que quiere. Va a tener el apoyo unánime y absoluto 
					del Partido Socialista. Carmen, Aquilino y Mayda son 
					personas dispuestas a dar todo por Ceuta siendo conscientes 
					de las dificultades y del contexto en el que se mueven. 
					Ellos están dispuestos a pelear.  
					 
					P.- Las encuestas han dado como vencedor del debate del 
					pasado lunes al candidato a la Presidencia del Partido 
					Popular, Mariano Rajoy, frente a Alfredo Pérez Rubalcaba. 
					¿Cuál es la valoración que hace usted de este debate y de 
					esta ‘victoria’? 
					 
					R.- Mariano Rajoy leyó y ni siquierea leyó bien. Ayer se vio 
					claro algo: quien tiene un proyecto de futuro claro para 
					España es Alfredo Pérez Rubalcaba -siendo conscientes de la 
					situación que vive nuestro país-. Una persona que se limita 
					a leer la ‘chuleta’ que se le había preparado es alguien que 
					no se merece gobernar España. España merece algo mejor que 
					lo que puede darnos el señor Mariano Rajoy.  
					 
					P.- En cuanto a los sondeos que hablan de una 
					considerable caída en el número de escaños del PSOE, ¿cree 
					que se ajustan a lo que va a ocurrir? 
					 
					R.- Tener 55 años me permite tener una cierta perspectiva 
					histórica. Recuerdo perfectamente las elecciones de 1993 y 
					1996 donde las encuestas eran exactamente igual: 15-16 
					puntos... En el año 93 ganó por tres el Partido Socialista y 
					en el 96 lo hizo el PP por un punto. No es una perogrullada, 
					es algo cierto que la encuesta buena es la del día 20, la 
					encuesta que vale. Ahí creo que más de uno se va a llevar 
					una verdadera sorpresa. Unos celebran las encuestas, otros 
					pretendemos celebrar el resultado de las urnas que es lo más 
					importante.  
					 
					P.- ¿Qué ha significado para usted ser secretario de 
					Estado y haber estado tan ligado a Ceuta? 
					 
					R.- En Ceuta estoy como en mi casa. Soy andaluz y he tenido 
					una relación muy intensa con Ceuta no ahora, sino que 
					también la tuve cuando fui consejero y vicepresidente de la 
					Junta de Andalucía. Trabajé mucho el convenio de 
					colaboración entre mi tierra y una tierra hermana. Hemos 
					hecho un esfuerzo importante permanentemente para conseguir 
					que Andalucía y Ceuta y viceversa se miren cada vez más a 
					los ojos. No solamente me encuentro como en mi casa, sino 
					que a mis compañeros de Ceuta les tengo igual o más cariño 
					que a mis compañeros de Jaén, mi provincia. Como secretario 
					de Estado me siento reconfortado por dos decisiones. En 
					primer lugar, se incluyó a Ceuta en los Fondos de Inversión 
					Local, es decir, el Plan-E. Éste iba destinado a los 
					municipios y a Ceuta no se le podía considerar un pueblo. 
					Había personas que decían que no había que introducirla en 
					algo tan importante en un aspecto que supuso inversión, 
					creación de empleo, mejora de infraestructuras, etc. No 
					solamente yo, sino también el vicepresidente Chaves, dijimos 
					que Ceuta tenía que considerarse al igual que cualquier otro 
					municipio e incluirla en estos fondos. Esto ha supuesto que 
					en dos años se hayan ejecutado en la ciudad obras por más de 
					21 millones de euros. En segundo lugar, una pelea en la que 
					mis compañeros de Ceuta, con José Antonio Carracao a la 
					cabeza, han jugado un papel determinante: conseguir, 
					‘bordeando’ todo -nunca la Ley por supuesto-, que a Ceuta se 
					le ampliaran las bonificaciones por lo que supone hacer del 
					mercado ceutí un lugar más atractivo a la hora de crear 
					riqueza y puestos de trabajo. Por lo tanto hay un compromiso 
					del gobierno con Ceuta. Este sistema de bonificaciones 
					singulariza a la ciudad en el conjunto del Estado.  
					 
					P.- ¿Cree que las bonificaciones se podrían haber 
					aprobado antes? ¿Considera que el PP se ha anotado ‘un 
					tanto’ en este sentido?  
					 
					R.- Se aprobó en su momento y su entrada en vigor será en 
					enero de 2012. No queremos hacer políticas baratas con algo 
					tan importante como es el desempleo, que es nuestra 
					fundamental preocupación. Y no sólo por las bonificaciones, 
					sino por los Planes de Empleo que durante esta legislatura 
					han significado una inversión del Gobierno de la Nación que 
					supera los 60 millones de euros. En el tema de las 
					bonificaciones, pese a algún comportamiento torticero, fue 
					el PSOE, y la persona que le habla, la que en el último 
					minuto, ante la negativa del Senado a tramitar unas 
					enmiendas, buscó la fórmula que permitió que se introdujeran 
					en una Ley para que no se quedara simplemente en un 
					proyecto. En las bonificaciones cumplimos nuestro compromiso 
					y el trabajo que hizo el secretario general del Partido 
					Socialista de Ceuta fue excelente. El que quiera sacar 
					pecho, que saque, lo que nos preocupa es la gente que está 
					en el paro.  
					 
					P.- ¿Qué les diría a los ciudadanos para que vuelvan a 
					confiar en el Partido Socialista? 
					 
					R.- No nos estamos jugando el presente sino el futuro. El 
					futuro es: cómo salimos de la crisis, la cual va a ser 
					fundamental para el diseño de lo que va a ser la España del 
					siglo XXI. El paro y la crisis están ahí. Esta situación se 
					puede afrontar desde el ‘sálvese quien pueda de la derecha’ 
					o desde un Estado que dé cobertura a aquellos que lo pasan 
					peor para que nadie quede atrás. Nos estamos jugando un 
					Estado del Bienestar fuerte y que permita salir a todos de 
					la crisis en igualdad o, por el contrario, alguien que 
					plantea que todo dependerá. A más poder de la derecha, menos 
					derechos para la gente.  
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