| 
                     
					La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha puesto fin a la 
					campaña de vigilancia y detección de incendios forestales 
					que comenzó el pasado 1 de junio. Tan sólo se registró un 
					conato de incendio el pasado 14 de agosto en una superficie 
					de 100 metros cuadrados. Bomberos y Brigadas Forestales han 
					coordinado los trabajos. 
					 
					La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha puesto fin a la 
					campaña de vigilancia y detección de incendios forestales, 
					la cual comenzó el pasado 1 de junio. La portavoz accidental 
					del Ejecutivo local, Mabel Deu, valoró ayer el buen 
					resultado de la campaña. “El período se ha cumplido sin que 
					se haya registrado ni un solo incidente en los últimos cinco 
					meses”, explicó.  
					 
					Este plan ha sido llevado a cabo en coordinación con el 
					Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) junto 
					a los nueve agentes de la Brigada Forestal de la empresa 
					municipal Obimasa. Los dos retenes pertenecientes al Cuerpo 
					de Bomberos se posicionaron en García Aldave, en concreto en 
					el Monte de la Tortuga, y en el Monte Hacho. Los equipos han 
					realizado durante estos últimos meses trabajos de prevención 
					y de mantenimiento del entorno forestal, además de patrullar 
					por las pistas de más riesgo.  
					 
					Deu también remarcó que, a pesar de que en la ciudad haya 
					habido “alerta roja por riesgo de incendio” a lo largo de 
					este verano, no se ha producido ningún incidente de 
					gravedad. El único destacable que se registró fue un 
					“pequeño conato de incendio” el pasado 14 de agosto. La 
					superficie en la que se produjo este conato fue de 100 
					metros cuadrados, lo que sitúa este verano como “el mejor de 
					los últimos años”. La portavoz accidental añadió: “En 2010 
					tampoco hubo incendios pero se registraron cuatro conatos 
					sobre una superficie de 800 metros cuadrados”. Mientras, en 
					2009 se quemaron 35.000 metros cuadrados en dos incendios y 
					también se produjeron 12 conatos. Por otra parte, en 2008 se 
					quemaron 25.000 metros cuadrados de monte, la mitad de lo 
					que se quemó en el incendio que se produjo en 2006 y 10.000 
					más que en el que ocurrió en 2005. El año 2004 fue “el peor 
					de los últimos años”, cuando se sucedieron hasta diez 
					incendios que afectaron a una superficie de 256.000 metros 
					cuadrados. En definitiva, “2011 es el tercer año sin 
					incendios de los últimos ocho y el de menos superficie 
					afectada después de 2005”, finalizó Deu.  
   |