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					Inevitable en una comparecencia de la eficaz Consejera de 
					Menores Susana Román, no plantearle el tema de los MENA y 
					más en estos momentos tras la denuncia presentada por la 
					Guardia Civil relativa a la existencia de mafias organizadas 
					para introducir a muchachos marroquíes en Ceuta, un tema que 
					en estos momentos trata la Fiscalía. De forma innecesaria 
					por cierto ya que se ha reiterado en infinidad de ocasiones 
					el tema del Tratado Bilateral suscrito entre España y 
					Marruecos en el año 1997 de devolución automática de los 
					jóvenes menores de edad que accedan ilegalmente a España. 
					Devolución y puestos bajo la custodia de la Policía Marroquí 
					para que garantice sus derechos ya que el Reino de Marruecos 
					tiene total capacidad para hacerse cargo y atender a las 
					necesidades de su juventud. El grimoso y baboso paternalismo 
					español hace que se declare en desamparo a jóvenes que 
					pueden tener familia y de hecho la tienen a un par de 
					kilómetros y tal presunto “desamparo” no sería en este caso 
					más que un fraude de ley. Si los muchachos están 
					desamparados que sean declarados adoptables o integrados en 
					familias de acogida, solo en último lugar los menores 
					permanecen en centros. La obligación de la Ciudad no es 
					devolver a los muchachos a sus casas ya que no tenemos 
					competencia en Marruecos, la obligación es ponerlos a 
					disposición de las Autoridades de la frontera que son bien 
					capaces de devolverles con sus familias. ¿O es que Ceuta 
					duda de la capacidad de la Policía Marroquí? 
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