| 
                     
					El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha desarticulado un 
					grupo organizado de distribución de estupefacientes que 
					operaba en la provincia castellano-manchega de Ciudad Real, 
					con ramificaciones en otras localidades, entre las que se 
					encuentra Ceuta. La denominada operación ‘Turbante’ se ha 
					saldado con la detención de diez personas y la incautación 
					de 190 kilogramos de hachís. La droga provenía de Marruecos 
					y fue intervenida durante un control policial en la 
					localidad de Valdepeñas. 
					 
					El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) ha desarticulado un 
					grupo organizado de distribución de estupefacientes que 
					operaba en la provincia castellano-manchega de Ciudad Real, 
					aunque tenía ramificaciones en otras localidades, entre las 
					que se encuentra Ceuta. La operación policial se ha saldado 
					con la detención de diez personas y la intervención de 190 
					kilogramos de hachís. 
					 
					Según los datos aportados ayer por la Subdelegación del 
					Gobierno en Ciudad Real, y recogidos por Efe, se trata de la 
					denominada operación ‘Turbante’, en la que han participado 
					agentes del Cuerpo Nacional de Policía, pertenecientes al 
					Grupo de Estupefacientes de la comisaría provincial de 
					Ciudad Real, en colaboración con agentes de las comisarías 
					locales de Puertollano y Valdepeñas. 
					 
					Desde Marruecos 
					 
					El grupo desarticulado se abastecía de hachís directamente 
					en Marruecos y lo distribuía en la capital de la provincia 
					castellanomanchega y en otras localidades como Miguelturra, 
					Almagro, Daimiel y Malagón. 
					 
					Además, los integrantes de la red de tráfico de hachís 
					actuaban en Madrid y en otras provincias del sur de España, 
					como Sevilla, Málaga, Granada y Cádiz, además de ya citada 
					Ceuta. 
					 
					La droga se le incautó a esta organización en un control 
					policial establecido en la Autovía de Andalucía, más 
					concretamente en el término de Valdepeñas, cuando dos de sus 
					integrantes transportaban el alijo, dispuesto en cinco 
					fardos de 38 kilogramos cada uno, en una furgoneta que 
					provenía de Marruecos. 
					 
					Posteriormente, se llevaron a cabo varios registros 
					domiciliarios y se detuvo al resto de miembros de la banda. 
					 
					Los agentes también les intervinieron dinero en efectivo, 
					dos vehículos, numerosos teléfonos móviles, tarjetas para su 
					uso en España y Marruecos y agendas de teléfono que 
					utilizaban para su actividad delictiva. 
   |