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					LUNES 2.  
					 
					Recibo llamadas para decirme que escriba acerca de esa 
					costumbre que se ha instalado de tirar cohetes y petardos en 
					las fiestas navideñas. Y mi respuesta es la siguiente: 
					¿acaso las autoridades no se han percatado de que ese hecho 
					amén de ser un despropósito puede ocasionar una desgracia en 
					cualquier momento? Pero los denunciantes me piden, por 
					favor, que yo convierta el hecho en noticia para que 
					semejante tropelía sea parada cuanto antes. No vaya a ser 
					que quienes cometen semejante abuso sigan haciéndolo durante 
					el resto del año. Y por cualquier motivo. Y así lo hice, 
					dedicándole al asunto la columna del miércoles. Pero mucho 
					me temo que lo de los cohetes haya arraigado de tal manera 
					que no sólo exigirá a las autoridades emplearse con mano 
					dura sino que, también, tendrán que acudir a las tiendas 
					donde los venden a fin de adueñarse de la mercancía. De no 
					ser así, hasta podría ocurrir que quienes practican el uso y 
					abuso del botellón decidieran sumar a su fiesta la 
					exhibición de cohetes y petardos. Y entonces, sólo nos 
					quedaría el socorrido apaga y vámonos. 
					 
					Martes. 3 
					 
					Llevo mucho tiempo sin escribir de fútbol. Y, por supuesto, 
					sin decir ni mu del mito español por antonomasia: Iker 
					Casillas. Quien, tras su lamentable actuación ante el 
					Málaga, en la Copa del Rey, dijo textualmente: “Regalamos 
					los dos goles”. Y se quedó tan pancho. Menudo andoba es el 
					gachó ese. ¡Se las sabe toda! El muchachito de Móstoles 
					tiene la cara de cemento armado. La misma que demostraron 
					tener Carlos Martínez y Michael Robinson, 
					cuando trataban de explicar mil cosas para ocultar que el 
					ídolo había pegado dos ‘cantadas’ morrocotudas. De las que 
					dejan huellas para siempre. Lo cual no es nuevo. Pues en 
					todos los partidos cuando el balón sobrevuela el área chica 
					el mito se queda petrificado encomendándose a todos los 
					santos para que sus defensas le eviten que sus vergüenzas 
					como guardameta se vean una vez más. Unos defensas que en 
					esa zona suelen llevar las de perder frente a delanteros que 
					lleguen en carrera. Los jugadores del Málaga, aleccionados 
					de que Casillas es el guardameta más endeble del fútbol 
					mundial en las salidas, sacaron buen provecho de semejante 
					debilidad. Una debilidad que pone de los nervios a sus 
					compañeros. Ah, a ver si de una vez por todas los ya 
					reseñados comentaristas de Canal Plus reconocen la enorme 
					labor de Lass y los muchos desaciertos de Xabi 
					Alonso. Otro de los futbolistas sobrevalorados por el 
					periodismo español. Cuyo partido ante los malagueños hizo 
					posible que le viésemos todas las carencias que tiene como 
					jugador. Ya está bien de favoritismos.  
					 
					Miércoles. 4 
					 
					Llego a ‘El Mentidero’ cuando la tarde acaba de comenzar. Ni 
					que decir tiene que el lleno es completo. Tanto dentro del 
					bar como fuera. Y es que hace una temperatura ideal para 
					tomar la copa de la amistad al aire libre. Jesús, Lima y 
					Carmen han de multiplicarse para atender al personal. 
					Mientras espero la llegada de Luis y Charo 
					(amigos foráneos que vienen a esta tierra, cada dos por 
					tres, para disfrutarla como si fuera la primera vez), 
					aparece José María Barrientos Sevilla, a quien no 
					veía desde hacía un mundo, y nos ponemos a charlar sin 
					contemplaciones. A charlar y a echarnos al coleto unos vinos 
					acompañados de unas estupendas conchas finas. Al final, 
					quedo enterado de lo bien que le va a mi estimado José María 
					al frente de su laboratorio de análisis clínicos. Como no 
					podía ser menos, tratándose de él.  
					 
					Jueves. 5 
					 
					José María Aznar gobernó con acierto los primeros 
					cuatro años que estuvo en La Moncloa. Verdad que está más 
					que demostrada. De la misma manera que se puede demostrar 
					que los cuatro siguientes fueron desacertados. También 
					podría calificarse de axioma lo que voy a decir a 
					continuación: Aznar se olvido de Ceuta en muchísimos 
					aspectos. Comportamiento que facilitó la llegada del GIL a 
					esta tierra y su triunfo en las elecciones. Me consta que a 
					los que tienen al tío del bigote en un pedestal, les 
					fastidia una enormidad que a mí, de vez en cuando, me dé por 
					sacar a relucir aquella postura de un presidente del 
					Gobierno que hizo posible que Ceuta fuera gobernada por 
					gente que venía dispuesta a desvalijar las arcas de la 
					ciudad. Dado que hoy he vuelto a referirme a Aznar en la 
					columna de la contraportada de este medio, los ha habido que 
					han vuelto a hacerme creer que están muy ofendidos. 
					¿Jesús Fortes…? No. Precisamente fue él el más 
					perjudicado por aquella falta de interés de Aznar por esta 
					ciudad. 
					 
					Viernes. 6 
					 
					Nace una mañana radiante. No obstante, echo de menos la 
					deliciosa algarabía de los niños celebrando lo que les han 
					dejado los Reyes Magos. Lo cual es señal evidente de que los 
					Reyes también se han visto obligados a hacer recortes 
					monumentales. Sin ruidos insistentes (aunque de vez en 
					cuando sigue atronando el espacio un desdichado cohete o se 
					oyen unas cuantas explosiones seguidas, petardos que unos 
					graciosos hacen reventar en acera cercana), me pongo a leer 
					un fragmento de un escrito de Cela que reza así: “La 
					vida no es muy larga, el que más dura no llega a los cien 
					años. La vida es un regalo que los dioses han hecho al 
					hombre; se les olvidó exigirle que no la hipotecasen. La 
					vida se inventó para amar a las mujeres que cruzan el camino 
					(con la trenza suelta y la falda pronta), para comer el pan 
					honesto y el pan curado, para beber el agua de la fuente y 
					el vino de los lagares, para ver mundo y hablar de las 
					cosechas”. Y llegado aquí, no sé por qué razón se me viene a 
					la mente el nombre de Urdangarin con celeridad. Y 
					pienso que el tipo se merece un escarmiento ejemplar. A 
					pesar del olvido de los dioses. 
					 
					Sábado. 7 
					 
					Doce la mañana. La explosión de un petardo en el bloque 
					donde vivo suena a bomba de mucho cuidado. Los vecinos salen 
					en tromba a los balcones para comprobar si están seguros. Se 
					oyen gritos y cunde el histerismo acompañado de expresiones 
					malsonantes contra el autor o los autores del hecho. Al 
					parecer, el petardo se ha colado en un patio interior y ha 
					estado a punto de prender fuego. El problema es el 
					siguiente: tengo más que asumido que muchos de esos vecinos 
					que, en esta mañana de sábado, han puesto el grito en el 
					cielo por tan absurdo ejercicio de pirotecnia, han permitido 
					que sus hijos se hayan pasado las fiestas tirando cohetes y 
					petardos por la Avenida del Ejército Español, por Zurrón, 
					por el Mixto y Villajovita. Sin la menor preocupación por 
					cuantas personas no podían conciliar el sueño. Por 
					consiguiente, me remito a lo que ya escribí el lunes. Las 
					autoridades están obligadas a intervenir cuantos antes con 
					el fin de cortar de raíz esta nueva moda. Antes de que 
					ocurra una desgracia. No es nada descabellado pedir que la 
					Policía trate de incautarse de tan peligroso material, allá 
					donde quiera que esté almacenado. 
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