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Diversas entidades, colectivos y organizaciones ciudadanas
de Barcelona piden el cierre del Centro de Internamiento de
Extranjeros (CIE) de la Zona Franca y de todos los CIE de
España por considerar que no se puede privar de libertad a
nadie por no tener su situación administrativa regularizada,
después de la muerte de inmigrante expulsado de Melilla y
que esperaba su repatriación.
Estas entidades, entre las que figuran la Federación de
Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) y SOS Racismo,
han hecho público un comunicado en el que denuncian que
desde que se abrió en el año 2006 el CIE de la Zona Franca
“se han producido numerosas irregularidades que han tenido
como consecuencia la vulneración sistemática de derechos de
las personas”.
Según estas entidades, que han convocado para el próximo
miércoles una conferencia de prensa para presentar el
manifiesto contra el mantenimiento de los CIE que todavía
están firmando algunas asociaciones, desde comienzos de este
año se han presentado dos denuncias por malos tratos en el
CIE de la Zona Franca.
Este Centro de Internamiento de Extranjeros de Barcelona se
ha puesto en el centro de las miradas de todas las entidades
que trabajan con personas inmigradas y en favor de los
derechos humanos desde que el pasado día 5 falleció el joven
guineano Idrissa Diallo, de 21 años, que fue internado en el
CIE de Barcelona, adonde fue trasladado desde el CETI de
Melilla. Un juez de Barcelona está investigando esta muerte
que, según fuentes oficiales, se debió a una parada
cardiorespiratoria por causas naturales.
Aunque el sindicato Confederación Española de Policía (CEP)
ha defendido la actuación de todos los agentes que custodian
el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona
Franca, la Asociación Papeles y Derechos para Todos
interpuso el pasado día 11 una denuncia porque cree que
podría haber habido una negligencia en la atención al
fallecido motivada, en parte, por la falta de traductores.
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