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Más de 2.000 pilotos, a los que se suman auxiliares de
vuelo, se han ido de España a lo largo de los últimos años
buscando mejores condiciones laborales. Asia y Oriente
Próximo, donde el transporte aéreo es hoy un sector en
expansión, son los principales destinos a donde se dirigen.
Un joven piloto ceutí con experiencia en Jordania y un
aprendiz de auxiliar de vuelo con destino Dubai son testigos
de un fenómeno al que Ceuta no queda ajeno.
Entre 4.000 y 5.000 personas se enfrentan desde hace semanas
a un incierto futuro laboral en el sector del transporte
aéreo desde la quiebra de la empresa Spanair. Pero no son
los únicos que demuestran que el sector está en crisis, de
hecho en los últimos años entre 2.000 y 3.000 pilotos
españoles se han ido marchando a trabajar en aerolíneas de
Oriente Próximo y otras zonas de Asia, donde la aviación
disfruta de un periodo de expansión.
“Muchos se están yendo allí ya que las condiciones
laborables y el nivel de vida está mejor que en España”,
afirma el piloto ceutí Sonu Keswani, en línea con las
declaraciones hechas hace unos días al diario El País por
Ariel Shocron, jefe de la vocalía técnica del sindicato de
pilotos SEPLA. Aerolíneas como Emirates, Qatar Airlines,
Kuwait Airlines o Korean Airwais ofrecen mejores sueldos y
condiciones laborales que incluyen seguro médico, una casa
pagada y facilidades para que los familiares puedan visitar
a los trabajadores en su país de destino. Andrés González
del Río (Ceuta, 1984) da cuenta de ello. Hace apenas un par
de días firmó su contrato con la aerolínea más grande de los
Emiratos Árabes Unidos, Emirates, para empezar a formarse y
trabajar como auxiliar de vuelo dentro de un mes en Dubai.
“Las condiciones son muy buenas: seguro médico, de
accidente, sueldo base de unos 1.000 euros pero que se queda
en una media de 2.500 libre de impuestos, un mes de
vacaciones en el destino que elijas... Son muy cuidadosos
con el personal que eligen, pero no paran de crecer y
convocar ‘open days’ en todo el mundo para contratar gente”,
explica por teléfono desde Madrid.
Así, la motivación económica se junta para estos
trabajadores, muchos de ellos jóvenes, con la de vivir una
aventura personal. Una vez que Andrés empiece a trabajar
volará a destinos como Nueva York o Hong-Kong y tendrá
estabilidad laboral al menos durante tres años. Si la
experiencia le gusta, podrá renovar. Si las previsiones se
confirman, la ‘fuga de pilotos’ españoles, además de
personal de cabina y otros dentro del sector, podría no
haber hecho más que comenzar.
A finales de 2011, compañías como Boeing anunciaron que
durante las próximas dos décadas harían falta 466.000
pilotos formados y 500.000 trabajadores relacionados con el
mantenimiento. Se prevé que casi la mitad de estos puestos
de trabajo se generen en la región de Asia -pacífico,
seguido por un 9% en América Latina. China tendrá una
demanda de más de 70.000, y Estados Unidos casi 100.000 más.
Pese a que las aerolíneas extrajeras ofrecen mejores
condiciones, el transporte aéreo crece en general, y como
contrapunto a esta demanda de personal al este del planeta,
dentro de las fronteras de la Unión Europea, la irlandesa
Ryanair apunta también a un importante crecimiento en 2012,
tras su reciente previsión de ganancias para este ejercicio
en el que, tras el cierre de Spanair, ha aumentado de los
440 millones de euros iniciales a 480.
Por su parte en España, la compañía Iberia abrió el jueves
pasado la convocatoria para la selección de TCP y personal
de oficinas de Iberia Express, cuyos requisitos son una
altura mínima 165 cm, nivel de castellano e inglés alto,
buena forma física y pasaporte europeo en vigor.
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