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Los pediatras del centro de salud de Otero denunciaron a
principios de enero que el Ingesa les había cambiado las
agendas de citas, lo que significaba que pasaban de atender
a un niño cada cinco minutos a tener que hacerlo cada tres,
lo que provocaba un incremento en los tiempos de espera. Al
no dar a basto, los cinco pediatras y las cuatro enfermeras
que trabajan en dicho servicio, remitieron, a través del
coordinador del servicio, las correspondientes quejas a la
directora médica de Atención Primaria, Betatriz Rodríguez,
quien respondió con una carta en la que desautorizaba al
citado coordinador a modificar las agendas.
Propuesta alternativa
Aunque de momento, la situación continúa igual, y el
coordinador sigue sin tener potestad para hacer los cambios
pertinentes, la directora médica se ha replanteado la
situación, según explican los propios trabajadores, quienes
han planteado una propuesta de agenda de máximos en la que
recogen que las consultas de demanda ordinaria tengan
asignados 7,5 minutos, y las urgencias o no demorables, 5
minutos. Respecto a los programa de niño sano, lo mantienen
en 20 minutos, desde las 8,30 hasta las 14 horas,
entendiendo -explican- “que por encima de eso no se puede
garantizar una adecuada asistencia”.
En ese sentido, desde CCOO explican que ya han transmitido
las quejas oportunas a Manuel Ramón Cabeza, recientemente
incorporado como gerente del Ingesa. Aunque este les ha
pedido un poco de tiempo para consensuar una alternativas,
desde el sindicato aseguran que el problema está en “vías de
solución”.
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