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					Casi un centenar de personas se reunieron ayer en Santa 
					Teresa para asistir al retiro de Cuaresma que dirigió el 
					obispo de Cádiz y Ceuta, monseñor Rafael Zornoza Boy, que 
					durante su intervención resaltó el valor del gozo de la vida 
					cristiana a través de las bienaventuranzas. Tras las 
					palabras del obispo, los fieles se trasladaron al templo 
					para la exposición del Santísimo. El retiro, el segundo 
					oficiado por Zornoza Boy, finalizó con unos minutos de 
					reflexión. 
					El obispo de Cádiz y Ceuta, monseñor Rafael Zornoza Boy 
					visitó ayer la ciudad para dirigir el tradicional retiro de 
					Cuaresma en la parroquia de Santa Teresa. A las 10.30 horas, 
					casi un centenar de fieles aguardaban la llegada del obispo 
					a quien arroparon varios párrocos de la ciudad y el vicario 
					general de Ceuta, Francisco Correro Tocón, que además abrió 
					el acto.  
					 
					Durante su intervención, Zornoza Boy resaltó “el mensaje de 
					gozo” que se encuentra en las bienaventuranzas y que es 
					capaz de “salvar y orientar”. El obispo abordó con los 
					fieles cuál es el sentido de la Cuaresma y recordó que los 
					cristianos de hoy son los mismos que buscaban a Cristo en el 
					Monte de la Esperanza para “recuperar, revivir y quitar lo 
					que pueda enturbiar el sentido de gozo de la vida 
					cristiana”.  
					 
					Tras las palabras de Zornoza Boy, los fieles se trasladaron 
					desde el Salón Parroquial al templo de Santa Teresa para la 
					exposición del Santísimo. El retiro acabó con unos minutos 
					de reflexión, tras los cuales los fieles se despidieron del 
					obispo.  
					 
					Este es el segundo retiro que ha dirigido monseñor Zornoza 
					Boy después de que el pasado mes de octubre tomara posesión 
					oficial de su cargo en un acto religioso oficiado en la 
					Santa Iglesia Catedral. 
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