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F.R.D. y N.L.L. acudieron ayer a los juzgados esposados.
Llevan más de un mes en prisión después de que el pasasdo 30
de enero les descubrieran intentando embarcar con casi 300
kilos de hachís en el vehículo donde viajaban. El
propietario admitió ante el magistrado que llevaba un kilo
de droga, mientras que su compañera, con antecedentes por
tráfico, negó conocer el origen de la droga.
F.R.D. admitió ayer ante el juez del Penal número dos que el
pasado 30 de enero se disponía a pasar droga a la península
a su vehículo y que llevaba un kilo para consumo propio. Sin
embargo, los agentes de Guardia Civil que registraron el
coche descubrieron droga repartida por todo el coche. Desde
el motor, hasta la rueda de repuesto, pasando por las
defensas, las puertas e incluso dos maletas en las que sólo
había hachís, según explicaron en la vista los dos agentes
que intervinieron en la detención. En total, el Mitsubishi
Montero en el que él procesado pretendía cruzar a Algeciras
había 268 kilos de droga. Aunque él dijo desconocer de dónde
procedía y cómo había llegado allí.
Tampoco lo sabía N.L.L., la mujer que le acompañaba y que
aseguró haberlo conocido un rato antes cuando el otro
imputado le había preguntado cómo ir al puerto. Tras hablar
unos quince minutos, ella aseguró haber confiado en él para
embarcar y que después la dejara en casa da la prima de su
ex pareja en Algeciras. La mujer, además contaba con
antecedentes penales por tráfico de drogas. Por ello, para
la imputada, la fiscal ha solicitado una pena de cuatro años
y seis meses de prisión y para el acusado cuatro años y tres
meses. Ambos se enfrentan también a una multa de 1.118.646
euros cada uno.
La defensa solicitó para F.R.D. una rebaja en la pena por
ser adicto a las drogas. Mientras, el abogado de N.L.L.
pidió la libertad para la mujer que negó relación alguna con
el otro imputado.
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