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					La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) 
					envió ayer un comunicado de prensa en el que resalta que ha 
					propuesto a los grupos parlamentarios que la Reforma Laboral 
					no afecte al personal que obtuvo su plaza por oposición y 
					que se prohíban los ERE’s en los servicios públicos 
					fundamentales.
 CSI-F inició ayer una ronda de contactos con los grupos 
					políticos en el Congreso de los Diputados, tal y como se ha 
					asegurado desde la sede ceutí, para analizar el impacto de 
					la reforma laboral sobre las Administraciones Públicas, de 
					cara a su próxima tramitación parlamentaria.
 
 Estos contactos, tal y como recoge la nota de prensa, ha 
					comenzado con los grupos Popular y Socialista, y continuarán 
					a lo largo de los próximos días con el resto de las 
					formaciones parlamentarias.
 
 La central sindical entiende en el comunicado de prensa que 
					“la reforma laboral propiciará la destrucción de empleo 
					también en el sector público ya que, el Estado, las 
					comunidades autónomas y los ayuntamientos podrán despedir al 
					personal laboral que accedió a su plaza mediante oposición 
					aduciendo causas técnicas, organizativas y de la producción 
					igual que en la empresa privada”.
 
 Finalmente, CSI-F señala “la necesidad de definir claramente 
					y determinar aquellos servicios públicos prestados por la 
					Administración con Empleados Públicos, como es el caso de 
					lso sectores de enseñanza, la sanidad, la dependencia, la 
					lucha contra el fraude, la justicia, la administración, la 
					seguridad, frente a otros servicios.
 
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