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					Asociaciones locales como Acefep o Aden se muestran 
					contentos pero precavidos ante el compromiso planteado por 
					la ministra de Sanidad, Ana Mato, en el que se compromete a 
					abordar a los pacientes crónicos con una estrategia basada 
					en el apoyo a los familiares y la investigación.
 La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana 
					Mato, anunció el pasado jueves la puesta en marcha, por 
					primera vez, de una Estrategia para el Abordaje de los 
					Pacientes Crónicos. Se trata de una iniciativa para “mejorar 
					el tratamiento de las condiciones de enfermedades crónicas, 
					integrando la prevención en todos sus ámbitos y promoviendo 
					la continuidad asistencial, al mismo tiempo que se da 
					respuesta a las necesidades sociosanitarias de los 
					pacientes”, explicó la ministra, quien esbozó el plan en 
					cuatro pilares: la prevención -para lo que actuará sobre 
					factores de riesgo como el consumo de tabaco, de alcohol y 
					dieta inadecuada-; la promoción del paciente como centro del 
					sistema a través de la creación de Escuelas de Pacientes; la 
					eliminación de compartimentos estancos, a través de la 
					integración de la atención primaria y hospitalaria, con el 
					fin de garantizar la continuidad asistencial, y por último, 
					la capacitación de los profesionales médicos, apoyando la 
					innovación y la investigación.
 
 Ante estas palabras, las asociaciones ceutíes que atienden a 
					enfermos crónicos están alerta. “Si todo esto se lleva a 
					cabo, sería maravilloso; pero hay que ver cómo puede 
					concretarse porque sabemos que es caro”, explican desde 
					Acefep (Asociación ceutí de familiares de enfermos 
					psíquicos). “En nuestro caso, hay trastornos que son 
					temporales, pero otras enfermedades que son crónicas”, 
					añade.
 
 Desde Aden (Asociación de discapacitados de enfermedades 
					neurológicas) hacen hincapié en el punto esbozado por la 
					ministra sobre la investigación. “Es lo primordial para 
					atender a las enfermedades raras, un mayor conocimiento 
					influiría en el precio de los tratamientos”, agrega. También 
					desde la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) 
					recalcan el papel de la investigación. “Hace falta la 
					colaboración de las administraciones”, matizan.
 
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