PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - MIÉRCOLES, 14 DE MARZO DE 2012

 

OPINIÓN / ANALISIS

Un Gobierno pragmático
en la Mesa de Negociación

 


Nuria de Madariaga
opinion@elpueblodeceuta.com

 

Gobierno y centrales sindicales se reunieron ayer en torno a la Mesa de Negociación como claro exponente de que “dos no se entienden si uno no quiere”. Con anterioridad y por puras malas influencias, los sindicatos sacaron adelante una “Declaración de Principios” que tuvo la virtud de aunar las sensibilidades de la mayoría absoluta de la ciudadanía, es decir que todos los ciudadanos proclamaron que los sindicatos que no se encuentran legitimados por las urnas, no son quienes para inmiscuirse ni entrometerse en cuestiones netamente políticas, es decir en los asuntos que competen en exclusiva a un Gobierno surgido de la voluntad popular.

“De temas laborales sí, de temas políticos jamás” fue la clara respuesta del Gobierno y las centrales sindicales. Así han vuelto a la Mesa de Negociación para ceñirse en exclusiva a su campo de acción y de actuación que es el laboral y cada cual en su lugar por lo que, bajo el imperio de la razón y de la lógica, los sindicatos han podido comprobar en vivo y en directo la flexibilidad y la buena disposición del Director General de Recursos Humanos, Juan Manuel de la Torre, a la hora de tratar y de proponer alternativas factibles en nombre del Gobierno de la Ciudad. Todo tan cuadriculado y pragmático como es habitual en su “modus operandi”.

La bien diseñada alternativa se circunscribe a que la Ciudad ofrece un Complemento Personal Transitorio que equivale al 50% de lo que cobran los funcionarios que han venido realizando esas jornadas partidas que ahora se van a eliminar, por innecesarias.

Es decir que quitan con una mano y devuelven una parte de la retribución con la otra, con el fin de no fastidiar tanto a los afectados. ¿Y pueden quejarse de tamaña generosidad por parte del Gobierno en plena crisis de las crisis?. Indudablemente no pueden hacerlo porque sería malvado e insolidario para con los pobres y con los parados que consideran a los funcionarios auténticos privilegiados alcanzados por la gracia de Dios Padre y firmarían por cambiarse por ellos aunque les costara media vida.

¿Y que ofrecerán los trabajadores a cambio de este tratamiento excepcional? Pues estar “disponible” para trabajar fuera del horario laboral en circunstancias especiales y “dedicado”, asunto que se refiere a 80 horas dedicadas a tareas específicas. ¿A que resulta todo muy ligth?. Eso es porque nuestros gobernantes electos son personas hábiles y sensatas a la hora de tomar soluciones intermedias y que contenten medianamente a las partes, se liman aristas, se descartan exigencias churriguerescas, se le dan varios capotazos a la crisis para verse mínimamente afectados por los rigurosos recortes que se están realizando a nivel nacional, se exalta el factor diferencial de Ceuta y se acaba dando la vuelta al ruedo mientras se saluda al respetable que observa desde los tendidos, ya apaciguado al constatar que la Declaración de Principios quedó en agua de borrajas y en mera tentativa o más bien en acción frustrada.

El Gobierno ha demostrado de forma acrisolada que “quiere” negociar y ahí están las buenas propuestas.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto