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El soldado Imad Ibn Ziaten, la primera de las siete víctimas
mortales de Mohamed Merah, el asesino de Toulouse, será
enterrado en la localidad marroquí de Mdiq (Rincón), de
donde es originaria su familia. El joven militar, de 30 años
y suboficial del primer regimiento de paracaidistas de
Francia, fue asesinado a tiros por Merah, de origen argelino
y de 23 años, el 11 de marzo en un barrio al este de
Toulouse, donde se había citado con él a través de internet
para comprarle una moto.
El joven francés de origen marroquí Imad Ibn Ziaten, se
convirtió el pasado día 11 en la primera de las siete
víctimas mortales de otro joven de la misma nacionalidad y
procedencia argelina, Mohamed Merah, el asesino confeso de
Toulouse y Moutauban (Francia) muerto ayer de un tiro en la
cabeza durante el dispositivo policial para su captura.
La vida de Ziaten, se cruzó con la de su asesino, según las
investigaciones policiales, en el momento en que puso en
internet un anuncio para vender su moto. La víctima, de 30
años, era suboficial del primer regimiento de paracaidistas
de Francia y, según la información recabada por la agencia
Efe, tanto él como los otros tres militares, también
paracaidistas, atacados el día 15 (dos de ellos, muertos),
pertenecían a destacamentos que habían estado desplegados en
Afganistán.
El diario marroquí ‘Demain’ recogía ayer que, en contra de
las primeras previsiones, que indicaban que el joven Zaiten
sería enterrado ayer jueves en la localidad de la que
procede su familia, finalmente se espera pueda recibir
sepultura el próximo domingo. Su familia deseó que se
celebrara una ceremonia religiosa en la mezquita de Rouen
(al oeste de Francia), antes del traslado del cadáver, que
será este fin de semana.
De acuerdo con la información que publica el diario El País,
el soldado asesinado puso en venta su motocicleta ‘Suzuki
650 Bandit’ en la página web ‘Le Bon Coin’. El autor de los
ataques quedó el 11 de marzo en torno a las cuatro de la
tarde con el militar, que acudió vestido de paisano, junto
al colegio Chateau de Hers. Poco después el soldado fue
hallado muerto junto a su moto, con un disparo en la cabeza.
La policía francesa buscó pistas en la web gracias al
contacto que tuvo la víctima con su asesino por Internet.
Los agentes investigaron a todas las personas que leyeron el
anuncio, y analizaron si había más anuncios de la primera
víctima que hubieran permitido al agresor ponerse en
contacto con él. El martes, el fiscal confirmó que Imad Ibn-Ziaten
se había identificado en el anuncio como soldado y con su
nombre de pila, Imad, por lo que el agresor pudo suponer que
era de origen norteafricano.
El presunto asesino del joven militar, otros dos soldados, y
de un profesor y tres niños judíos, se definió ante los
negociadores de la policía, que le mantuvieron cercado desde
la madrugada del miércoles, como un ‘muyahidín’ miembro de
la organización Al Qaeda. En el pasado había sido condenado
quince veces por el Tribunal de Menores de Toulouse y en los
últimos años había viajado a Afganistán y Pakistán, donde
pudo recibir entrenamiento militar en campamentos
terroristas.
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