cultura - LUNES, 2 DE ABRIL DE 2012

CEUTA
P. Zumeta
ceuta@elpueblodeceuta.com

El equipo de arqueólogos especializados en el estudio de sociedades prehistóricas ha finalizado la campaña de excavaciones realizada en la Cueva de Enrique, en el Mogote de Benzú. En ella se han encontrado registros óseos y faunísticos relacionados con los niveles de tecnología del Abrigo de Benzú.

El equipo de arqueólogos especializados en el estudio de sociedades prehistóricas, vinculados al grupo PAI-HUM-440, ha finalizado la campaña de excavaciones arqueológicas realizada en la Cueva de Enrique, ubicada en el Mogote de Benzú. Las labores, que comenzaron a principios del mes de marzo, han aportado una nueva “secuencia cronoestratigráfica”, con depósitos arqueológicos que “continuarán ofreciendo información de gran interés del medio natural del Pleistoceno y Holoceno”.

Según se explica en una nota de prensa, la excavación se enmarca en la continuidad de los estudios que la Universidad de Cádiz viene realizando en la ciudad desde el año 2002 acerca de las sociedades cazadoras-recolectoras-pescadoras y tribales comunitarias neolíticas. Los trabajos han estado co dirigidos por Eduardo Vijande, José Ramos y Darío Bernal.

El sondeo se ha realizado en un total de 13 cuadrículas y ha ofrecido, en síntesis, cuatro niveles estratigráficos de los cuales interesa “por ahora destacar la homogeneidad e interés de los estratos 3 y 4, que presentan registros óseos y faunísitcos vinculados con ocupaciones de época prehistórica” y que guardan “gran similitud a los niveles con tecnología de Modo III-Musteriense del Abrigo de Benzú”.

Por otra parte, ya se han puesto en marcha los estudios geológicos. En este punto, la responsabilidad recaerá sobre Salvador Domínguez-Bella. También se van a llevar a cabo estudios medioambientales que permitirán “ampliar el conocimiento de la secuencia, con nuevos datos croestratigráficos y paeloecológicos”.

Fauna terrestre

El miembro del ‘Espeleo Club de Algeciras’, Antonio Luque, ha realizado la topografía y estudio documental de la cavidad en la Cueva de Enrique.

En cuanto a los estudios de fauna, en la nota se indica “la interesante información aportada por los datos nuevos de fauna terrestre y fauna marina, que hablan de un aprovechamiento de recursos que ofrecía la fauna potencial pleistocena con documentación de ‘Bos primigenius’, procedente del estrato 3, así como otros muchos registros de huesos fracturados, que se encuentran en fase de estudio y esán situados en toda la secuencia estratigráfica”.
 

La cavidad, usada como un lugar de refugio

Las evidencias de fauna marina en la Cueva de Enrique, las cuales han sido estudiadas por el arqueólogo Juan Jesús Cantillo, muestran la presencia de “bivalvos marinos y de gasterópodos marinos” además de gasterópodos indeterminados, o la ya muy conocida en la zona ‘Patella ferrugínea’.

Igualmente está documentada la presencia de peces con un ejemplar de la familia ‘Sparidac’, adscribible a la dorada. Por otro lado, el equipo ha aportado un “avance destacado de un análisis tafonómico de las zonas potenciales de recolección, donde se observa una cierta preeminencia por especies gasterópodas de la zona mesolitoral alta y en menor medida, la zona infralitoral”. También se han realizado “avances de las técnicas de recolección”.

Otro apartado de “gran interés” de este estudio ha sido el correspondiente al análisis de las materias primas líticas talladas -ahora se encuentran en estudio por Salvador Domínguez-Bella. Así, se ha observado el “predominio de areniscas compactas y la presencia de sílex radiolaríticos”. Por su parte, los productos líticos tallados muestran la presencia en los estratos 3 y 4 de núcleos de técnica ‘levallois’ y centrípeta. Entre los productos se han documentado sobre todo muescas y denticulados, los cuales están representados en el estrato 1. Todo ello “permite vincular claramente la existencia de relaciones con los pobladores del Abrigo de Benzú, lo que llevaría a manifestar una ocupación-refugio de esta cavidad por sociedades”.