| 
                     
					 
					Son unos Presupuestos que no dañan la esencia de la 
					recuperación económica”, ha dicho Montoro en rueda de 
					prensa, donde ha dicho que las cuentas son “extraordinarias” 
					en cuanto a la reducción del gasto y el aumento de ingresos 
					que plantean. “Son unos Presupuestos a tener de la situación 
					extraordinaria de España”, ha indicado. De hecho, ha 
					asegurado que los Presupuestos están “absolutamente 
					comprometidos” con la corrección del déficit, con una 
					reducción del gasto y un aumento de los ingresos en las 
					partidas “más neutras” sobre el crecimiento económico. 
					 
					Además, ha dicho que las cuentas que permitirán al país 
					cumplir el objetivo de déficit marcado por los compromisos 
					europeos, que pasa por reducir el déficit del 8,5% al 5,3% 
					en un año, un compromiso “sine qua non” para superar la 
					crisis económica. 
					 
					En este sentido, el titular de la cartera de Hacienda se ha 
					mostrado “convencido” de que el desafío de estos 
					Presupuestos es recuperar la confianza de los socios 
					europeos, de los inversores y de los acreedores españoles, 
					algo especialmente importante para un país que, como España, 
					tiene una “brecha” de financiación con el resto del mundo.
					 
					 
					“Hay que reducir la dependencia financiera. Cuando lo 
					consigamos seguro que vendrá la recuperación de la economía. 
					El mayor problema de España, y el que produce y agrava la 
					recesión y nos lleva a pérdida de puestos de trabajo tan 
					lamentables como se siguen produciendo, es la financiación 
					de la economía, el alto endeudamiento. Por tanto, la 
					situación financiera de los agentes económicos en España es 
					fundamental”, ha insistido.  
					 
					A renglón seguido, el ministro ha explicado que precisamente 
					el “error” del anterior Gobierno socialista fue “afirmar que 
					una crisis financiera mundial no iba a afectar a España”. 
					“Al estrangular esa financiación la crisis se hace muy 
					fuerte y el sector público vino a complicar el problema al 
					añadir más necesidad de financiación y aumentar el peso de 
					la deuda sobre el PIB en 30 puntos”, ha apostillado.  
					 
					“Por eso, la forma más certera y corta de salir de la crisis 
					es reducir el déficit público, pero no de cualquier manera. 
					No es lo mismo hacerlo reduciendo ciertas categorías de 
					gasto u otras, o apelando a más ingresos tributarios de una 
					forma u otra. En función de la situación económica tenemos 
					que ser selectivos en los ajustes”, ha concluido Montoro.
					 
					 
					Pero ¿en qué va a gastar el dinero el Gobierno y qué 
					partidas se van a ver más recortadas? Una vez más, las 
					pensiones van a ser la principal partida con 115.825,93 
					millones, lo que supone un 37% del total. El Estado 
					ingresará un 4,3% más por los impuestos: así financiará el 
					presupuesto. 
					 
					La siguiente mayor partida es la de transferencias a otras 
					administraciones, que alcanza los 49.685 millones de euros, 
					casi 7.000 millones más, el mayor incremento de todos. 
					 
					A continuación se sitúa el servicio de la deuda pública, que 
					supone 28.848 millones de euros, 1.450 millones de euros más 
					que en 2010 y ya supone un 9,3% del total del gasto del 
					Estado.  
					 
					Mientras, el gasto en prestaciones por desempleo se reduce 
					en 1.679 millones de euros (-5,5%) hasta los 28.805 millones 
					de euros. El desempleo, junto a las pensiones, son las dos 
					principales partidas del Gasto Social, que se reduce en 
					conjunto un 4,3%, hasta 175.382,7 millones, lo que supone el 
					56,2% del total presupuestario. En este apartado destacan la 
					reducción del 21,9% en Educación y del 6,8% en Sanidad. En 
					Cultura habrá un gasto un 15,1% menor.  
					 
					El presupuesto de Justicia se reduce un 5,9%, el de Defensa 
					un 8,8%, el de Seguridad Ciudadana un 0,6% y el de Política 
					Exterior un 38,9%. Estos cuatro apartados, considerados 
					servicios públicos básicos, sufren un recorte en conjunto 
					del 9,2%, y suponen 17.909 millones, el 5,7% del total del 
					presupuesto.  
   |