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					Después de la celebración de la Semana Santa existen dos 
					hermandades en Ceuta, Amargura y Flagelación, que todavía 
					tenían que realizar su traslado de regreso a sus respectivas 
					sedes canónicas. Ambas cofradías procedieron ayer a regresar 
					a sus respectivas sedes pese a la desapacible tarde de 
					fuerte viento que deslució el cortejo que las hermandades 
					formaron para desarrollar este acto. 
					 
					La Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos de 
					Nuestro Padre Jesús Caído y Nuestra Señora de la Amargura de 
					San Juan de Dios y la Hermandad Sacramental y Cofradía de 
					Penitencia de Nuestro Padre Jesús de la Flagelación y María 
					Santísima de la Caridad, pese al incesante y molesto viento 
					que ayer azotaba la ciudad, procedieron al traslado de sus 
					Amantísimos Titulares hasta sus respectivas sedes canónica. 
					Las juntas de gobierno de las Hermandades organizaron los 
					cortejos que finalmente acompañaron, por un lado a Nuestro 
					Padre Jesús Caído y Nuestra Señora de la Amargura, y por 
					otro lado a Nuestro Padre Jesús de la Flagelación y a María 
					Santísima de la Caridad. 
					 
					Alrededor de las 21.00 horas daba comienzo, pese a la 
					desapacible tarde existente debido al fuerte viento de 
					poniente, el traslado de las imágenes de ambas hermandades. 
					Mientras Amargura iniciaba su recorrido desde la Santa 
					Iglesia Catedral con destino a la Parroquia de San Juan de 
					Dios, Flagelación, a la misma hora, partía desde su Oratorio 
					del Santísimo Cristo de la Flagelación en la calle Teniente 
					Pacheco en dirección a la Seo Septense. 
					 
					Las cuatro imágenes fueron portadas por los hermanos de cada 
					Hermandad. Un gran número de fieles devotos de ambas 
					hermandades se dieron cita ayer noche en los respectivos 
					traslado para arropar con su presencia este acto y acompañar 
					a los Titulares de las hermandades hasta su regreso a sus 
					respectivas sedes canónicas. El fuerte viento impidió que 
					los hermanos, que portaban cirios en sus manos, pudieran 
					encender los mismos para iluminar el itinerario fijado. Con 
					los traslados celebrados ayer por las hermandades de la 
					Amargura y la Flagelación se puede decir que se cierra 
					definitivamente el telón de la Semana Santa de 2012 que este 
					año ha venido marcada por la lluvia y provocó que un total 
					de 8 cofradías de las 14 existentes tuvieran que tomar la 
					difícil decisión de quedarse en su sede sin procesionar 
					debido a la lluvia y la mala meteorología. 
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