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					El Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta dejó ayer visto 
					para sentencia un juico por lesiones que estuvo marcado por 
					testimonios contradictorios que en algunos casos cayeron 
					incluso en la fantasía, cuando no en el absurdo. La Fiscalía 
					pide para un padre de familia tres años de cárcel por un 
					supuesto atropello intencionado. 
					 
					La juez titular del Juzgado de lo Penal número 1 dejó ayer 
					visto para sentencia un caso de lesiones en el que el 
					denunciante testimonió que fue atropellado por el acusado 
					con un Mitsubishi Montero 4x4, bajo cuyas ruedas permaneció 
					10 minutos, sufriendo sólo una inflamación del empeine del 
					pie derecho y una herida inciso-contusa en la región 
					occipital. 
					 
					Abdelouahid B. se enfrenta a una petición del Ministerio 
					Fiscal de tres años de prisión, indemnización a la supuesta 
					víctima de 1.444 euros más intereses legales así como el 
					decomiso de su vehículo. Igualmente forma parte de la pena 
					que pìde la fiscal dar cuenta de la sentencia condenatoria 
					-si la hubiere- a la autoridad gubernativa para que no se le 
					renueve el permiso de residencia y trabajo en territorio 
					nacional. 
					 
					Los hechos se remontan al 1 de abril de 2011, cuando el 
					denunciado recogía en su vehículo a su esposa, Fátima M.A., 
					para ir juntos a por su hija, a la salida del colegio, en la 
					calle Capitán Claudio Vázquez. Entonces, un hombre, Abselam 
					M.M. se acerca al vehículo, estacionado éste en paralelo 
					junto a la acera, en una zona con contenedores de vehículos. 
					Los testimonios varios indican que por algún motivo, el 
					hombre cerró la puerta del automóvil en el lado de la esposa 
					del denunciado. Así, parece ser que Abdelouahid B. 
					intercambió unas palabras con el denunciante, salió del 
					coche y ambos supuestamente mantuvieron un forcejeo sin 
					intercambiar golpes. A raíz de este forcejeo, Abselam M.M. 
					pudo golpearse en la región occipital, necesitando puntos de 
					sutura. Con posterioridad, Abdelouahid B. se monta en su 
					vehículo, un Mistubishi Montero 4x4, y se marcha, golpeando, 
					según su testimonio, uno de los contenedores de basura. Sin 
					embargo, la supuesta víctima, indicó que cuando se 
					encontraba en el suelo tras sufrir el golpe en la región 
					occipital, el denunciado subió con su vehículo por encima de 
					su cuerpo y mantuvo las ruedas de su 4x4 encima de él 
					durante 10 minutos. Las lesiones que se le apreciaron en la 
					primera de las comparecencia ante los servicios de urgencias 
					indicaron una herida inciso-contusa en la región occipital y 
					erosiones en el cuello, compatibles con un forcejeo y golpe 
					accidental. Ya sobre la medianoche acudió otra vez a 
					urgencias para declarar que le dolía el pie derecho.  
					 
					La facultativo que le atendió apreció una pequeña 
					inflamación en el empeine del pie derecho.  
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					La defensa aprecia incoherencias, fantasías y 
					contradicciones 
					Los testigos fueron descalificados 
					por el fiscal y la defensa según apuntaran a sustentar las 
					tesis de la acusación o de la defensa. Una mujer que dijo 
					haber visto el forcejeo, Sabah T.A. indicó que había visto 
					cómo el denunciado atropelló con su vehículo al herido, 
					golpeándole en las piernas, a la altura de los muslos. No se 
					apreciaron por parte de los facultativos lesiones en esta 
					zona. Otro testigo, éste de última hora, indicó que el 
					denunciante la emprendió a patadas con el vehículo y que 
					éste no lo atropelló. Las patadas propinadas a la puerta del 
					coche podrían ser compatibles con una inflamación del 
					empeine. El abogado defensor, que pidió la libre absolución 
					para su patrocinado, indicó que en el transcurso de las 
					declaraciones se habían evidenciado contradicciones, 
					incoherencias e incluso “fantasías”. 
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