| 
                     
					El presidente del Partido Democrático y Social de Ceuta 
					(PDSC), Tarek Mizzian, arremetió ayer contra la gestión del 
					equipo de Gobierno de la ciudad, indicando que “desde hace 
					más de cuatro años viene desarrollando planes de ajuste e 
					inversiones poco acertadas para el desarrollo de nuestra 
					ciudad”. 
					 
					Tras enumerar algunos ejemplos -manzana del Revellín, 
					dispersión de consejerías, políticas activas de empleo, 
					reactivación y dinamismo del comercio local y recortes 
					básicos en políticas sociales- Tarek Mizzian señala que “el 
					despilfarro y la gestión nefasta por parte del Ejecutivo 
					ceutí de dinero público ha conllevado que nuestras políticas 
					en bienestar de nuestros ciudadanos ocupen un lugar en el 
					‘ranking’ que los retrotraen a los años más duros del pasado 
					de Ceuta”. 
					 
					Así, indica que se han producido una “batería de reformas, 
					recortes en salarios, desmantelación del derecho de los 
					trabajadores, desigualdad de oportunidades y discriminación 
					de colectivos desfavorecidos de la ciudad”. Por contra, 
					desde el PDSC se señala que se ha “favorecido en primera 
					instancia a aquellos afines al ejecutivo, reactivando el 
					frenazo en las políticas sociales básicas para nuestros 
					vecinos que viven una realidad distinta a la del señor 
					Vivas”, en referencia al presidente de la Ciudad, Juan 
					Vivas. 
					 
					Neoliberalismo 
					 
					Según Tarek Mizzian, el Ejecutivo local “se ha enfrascado en 
					planes de austeridad neoliberales equívocos por el mal 
					diseño de sus estrategias reformistas, difundiendo medidas 
					que van en contra de nuestros ciudadanos”. Desde la 
					perspectiva del PDSC, estas medidas “se han traducido en lo 
					que tenemos hoy en día: proyectos que fracasan y despilfarro 
					de dinero público que no genera beneficio ni para los 
					vecinos ni para el Consistorio”. Añade que “se han hecho 
					grandes desembolsos de dinero público con beneficio sólo a 
					los amigos y enchufados del Ejecutivo para pagar favores 
					políticos. En definitiva, nuestro tejido comercial va a la 
					deriva por la falta de diligencia y reactivación de nuestro 
					principal motor: la economía comercial, empresarial y 
					hostelera”, concluyó el PDSC. 
   |